vitoria - Las Juntas Generales aprobarán el miércoles en el Pleno previo a Semana Santa el decreto normativo de urgencia elaborado por la Diputación para regular el impuesto de Plusvalía. Tras varias semanas trabajando en su confección, el documento fue refrendado el pasado 28 de marzo por el gobierno foral a la espera del necesario último paso del miércoles en la cámara provincial.
El decreto, que da respuesta a la sentencia del Tribunal Constitucional del 1 de marzo que anulaba el cobro del gravamen en los casos en los que se produzca minusvalía, establece como criterio para determinar la existencia o no de plusvalía la comparación entre el valor de adquisición de la propiedad y el valor de transmisión. Si el segundo es superior se produce plusvalía, por lo que habrá que abonar el gravamen.
“Vamos a ser la primera administración del Estado español en la que aquellos que tengan un decremento patrimonial, o no exista incremento patrimonial, no tendrán que pagar este impuesto”, aseguró ayer el diputado foral de Hacienda, José Luis Cimiano, que acudió a las Juntas a presentar al resto de grupos el documento que regulará este impuesto de forma transitoria, a la espera de que la Diputación Foral de Álava redacte, de forma armonizada con Bizkaia y Gipuzkoa, una reforma más amplia de la norma foral que regula este gravamen. Un lavado de cara completo que Cimiano confió en que pueda entrar en vigor “el 1 de enero de 2018”.
Eso sí, como apuntó el responsable de la Hacienda alavesa, es muy probable que durante los próximos meses los tribunales continúen dictando sentencias que podrían variar el enfoque con el que afrontar su modificación. Es más, Cimiano advirtió durante su comparecencia acerca de la posibilidad de que el impuesto de Plusvalía llegue incluso a volatilizarse directamente en función de lo que plantee la Justicia.
“No sabemos hacia dónde va a ir este impuesto, que tiene muchas aristas y puede acabar totalmente desdibujado. Me atrevería a decir que incluso podría llegar a desaparecer llegado el caso. Hay muchas incertidumbres al respecto”, aseveró el diputado, porque “no conocemos toda la realidad que se va a producir con este impuesto, al existir múltiples incidencias pendientes de resolución judicial relacionadas con él”.
eudel Mientras cristaliza el proyecto de reforma de la norma foral, Eudel, la asociación de municipios vascos, instó el mes pasado a los ayuntamientos del territorio a, al igual que decidió el Ayuntamiento de Vitoria, “no practicar las liquidaciones correspondientes” al impuesto de Plusvalía hasta que “no se adopten las medidas oportunas que clarifiquen los efectos derivados de la sentencia del Tribunal Constitucional”. Con todo, desde Eudel asumían que la adaptación de la normativa foral “no es sencilla y tiene su complejidad técnica”, por lo que entendía que fuera necesario “un análisis sosegado y profundo sobre la materia”.
“Eudel tomó esa decisión, pero no se debe tener a las entidades locales sin girar las correspondientes liquidaciones más allá de un periodo razonable, porque son tributos que forman parte de los ingresos presupuestarios de las entidades locales”, subrayó Cimiano, que se felicitó por haber sido “suficientemente rápidos” en la elaboración del decreto normativo de urgencia “para no perjudicar a nadie”.
Cuestionado por la coalición EH Bildu sobre el motivo por el que Álava ha optado por un decreto de urgencia en lugar de esperar a la elaboración de la reforma de la norma foral, Cimiano justificó la celeridad en que “sólo en Álava y Gipuzkoa tenemos una sentencia que crea una situación de incertidumbre, tanto para los ciudadanos como para las entidades locales”.
El documento que se aprobará finalmente el miércoles y que entrará en vigor en cuanto se publique unos días después en el BOTHA fija que los contribuyentes que no tengan aún la liquidación en firme de este impuesto, o todavía no se haya resuelto su reclamación, podrán acogerse a este cambio, aunque no en los casos de liquidaciones firmes antes del 1 de marzo, al no poder aplicarse con carácter retroactivo por “no ser posible jurídicamente”, aseguraba hace unos días el diputado general, Ramiro González. Por el momento, a la espera de que el ejecutivo alavés y sus homólogos de Bizkaia y Gipuzkoa armonicen la modificación la norma foral que regulará este gravamen, Álava sacará adelante el miércoles su propia normativa de urgencia.
Pleno. Tras su aprobación en el Consejo de Gobierno Foral del pasado 28 de marzo, el decreto normativo de urgencia para regular el impuesto de Plusvalía saldrá adelante en el Pleno que las Juntas Generales celebrarán el miércoles.
Decreto. El decreto da respuesta a la sentencia del Tribunal Constitucional del pasado 1 de marzo que anulaba el cobro del gravamen en los casos en los que se produzca minusvalía, y establece como criterio para determinar la existencia o no de plusvalía la comparación entre el valor de adquisición de la propiedad y el valor de transmisión. Si el segundo es superior se produce plusvalía, por lo que habrá que abonar el impuesto.
Impuesto. Los contribuyentes que no tengan aún la liquidación en firme de este impuesto, o todavía no se haya resuelto su reclamación, podrán acogerse a este cambio, aunque no en los casos de liquidaciones firmes antes del 1 de marzo, al no tener carácter retroactivo.
El diputado foral de Hacienda destacó ayer en su comparencia en las Juntas que “no conocemos toda la realidad que se va a producir” con este gravamen, al existir “múltiples incidencias pendientes de resolución judicial relacionadas con él”.
2018
El decreto que las Juntas Generales aprobarán el miércoles es una solución temporal hasta que Álava culmine la modificación de la norma foral del impuesto de Plusvalía, que se espera pueda entrar en vigor el 1 de enero de 2018.