la plaza de El Corte Inglés se valló ayer, de 9.30 a 13.30 horas, por obras y hoy hará lo propio la de Correos. Durante toda la mañana se vio sin parar a los trabajadores, con sus vistosos cascos rojos. Sin embargo, en ningún caso hizo falta que estas actuaciones tuvieran el visto bueno del Departamento municipal de Urbanismo, ya que ninguno de los operarios portaba pico y pala, sino folletos. Unos papeles informativos que repartían a todas las personas mayores que por allí pasaban para convencerles de que pueden saltar la valla de esa creencia popular que dice que el principal entretenimiento de los jubilados es ver obras y acercarse, día tras día, hasta que éstas acaben, para observar y criticar lo que allí se ve y se hace. Se trataba de una acción para reclutar personas mayores voluntarias, llevada a cabo por Batekin, la agencia para el voluntariado y la participación social de Álava, como antesala del Encuentro de Voluntariado Vasco de mañana en el Palacio Europa.

“Los mayores son los que tienen más disponibilidad porque tienen mayor tiempo libre y experiencia”, explica Ainara Pérez, dinamizadora de esta agencia, promovida por el Gobierno Vasco, Fundación Vital y Sortu, que fue creada el año pasado “por la ausencia de una entidad en el territorio que gestionara el voluntariado”, a diferencia de Bizkaia y Gipuzkoa donde sí que existía.

Son unos buenos candidatos para echar una mano en la sociedad y, además, como añade Pérez, “el voluntariado es una forma para que sean protagonistas en su vida y en una sociedad más justa y mejor”. Pese a ello, de los 29.689 voluntariados vascos (3.515 son alaveses) sólo un 16% se ubica en la franja de mayores de 65 años, frente al 33%, que tiene entre 18 y 33 años, o el 31% de los que tienen hasta los 45 años, según el último Informe Anual de la Situación de las Organizaciones de Voluntariado en la Comunidad Autónoma Vasca (CAV).

Para acabar con esta escasa aportación, Batekin ofrece un servicio gratuito y de calidad a todas aquellas que quieran iniciarse en el trabajo voluntario así como a las entidades sin ánimo de lucro con sede en Álava con programas de voluntariado. “Nosotros ofrecemos asesoramiento para ayudarles a encontrar una colaboración que encaje con su perfil, orientación sobre los diferentes ámbitos en los que puedes participar, formación básica y encuentros con personas interesadas en participar”, añade la dinamizadora de esta asociación que en su primer año de vida ha atendido un total de 371 personas, de las cuales 225 eran mujeres y 156 hombres, a las que, entre otras cosas, se les facilita información sobre lo que supone ser colaborador, dándoles una introducción a la participación, aclaración de dudas, y de los derechos y deberes.

Batekin, además, durante el pasado año coordinó a 62 entidades con sede en Álava, a las que ayuda a gestionar su voluntariado.

Diferentes áreas En la sede de esta agencia, en Cantón de Santa María 4 (local de Saregune), por ejemplo, les enseñan que a la hora de acercarse al voluntario se puede hacer desde diferentes ámbitos, que incluyen también labores administrativas, en asociaciones sobre temas diversos (adicciones, comercio justo, cooperación al desarrollo, diversidad funcional, educación y formación, empresarial, exclusión social, inmigración o sociosanitario).

Esperanza, con 85 años envidiablemente bien llevados, ya pone su granito de arena al respecto. “Hace unos siete años que colaboro con Intermón, dando una ayuda económica”, explica esta mujer, quien ayer escuchaba que también se puede colaborar de forma presencial en diversas asociaciones de Álava, gracias a las explicaciones de Batekin. “Me parece bien que podamos echar una mano aquí también en Álava porque hay gente que también lo pasa mal”, dice Esperanza.

Otra que lleva más de un lustro colaborando es Miren, de 68 años. “Vi en un cartel de la universidad que necesitaban gente para dar clases de castellano a inmigrantes y me apunté porque tengo Magisterio”, detalla.

Otros a los que les parece bien la idea de ser voluntario, aunque de momento se lo piensan, son la cuadrilla formada por José Luis (76), Eugenio y José, quienes ayer contemplaban la escenificación de Batekin desde uno de los bancos de la plaza, donde acostumbran cada mañana a ir para entablar conversación con los conocidos del entorno. “Los jubilados somos los más ricos porque estamos de banco en banco”, bromea José Luis en alusión a este entretenimiento diario. “Sí, pero con poca pensión, porque este Rajoy....”, añade Eugenio.

Su amigo José, en cambio, tiene otros pensamientos. “Yo no puedo ser voluntario en estos momentos porque ni siquiera puedo irme a Salamanca ahora en Semana Santa, ando de médicos porque me acaba de dar un ictus”, lamenta José. Al menos, es por fuerza mayor.

de mayores. Es el porcentaje de personas de más de 65 años que son voluntarias en Euskadi.

personas. Son las atendidas por Batekin durante el primer año de vida de esta agencia de participación social.

De ellas, 225 fueron mujeres y 146 hombres.

asistentes. Es el número de personas que probablemente reunirá el Encuentro de Voluntario Vasco que se celebra mañana en el Palacio Europa de la capital alavesa.