Vitoria - El director de la central nuclear de Santa María de Garoña, Miguel Ángel Cortés, defiende que la planta burgalesa es “más segura” y fiable que la media del resto de centrales nucleares en el mundo y avala esta afirmación en que ha pasado tres revisiones exhaustivas en diez años.
Cortés compareció el jueves ante la Comisión de Energía del Congreso de los Diputados para explicar aspectos técnicos y repasar las actuaciones de la central para mantener la planta en “las mejores” condiciones de seguridad, ante el “doble escenario” al que se enfrenta Garoña, que son la continuidad de la operación, o bien, el cese definitivo. Expuso que Garoña “se ha sometido en los últimos diez años a tres revisiones” que han concluido que “no existen impedimentos técnicos para la operación segura de la central”, ya que la prioridad y “premisa” de Nuclenor, su titular (Iberdrola y Endesa), ha sido y es la seguridad” de la instalación, la protección de los trabajadores y el público y el respeto al medio ambiente. “Toda nuestra gestión se desarrolla en torno a este principio y la principal motivación de nuestras actividades es el mantenimiento de las adecuadas condiciones para el funcionamiento seguro y fiable de la central”, señaló. También elogió a los 242 trabajadores de Nuclenor y a los más de 200 empleados de empresas colaboradoras porque “se han enfrentado de modo ejemplar al reto que esta situación representa”.
Respecto a las tres evaluaciones pasadas por Garoña en estos últimos diez años, resalta la “fiabilidad” de la central “por encima de la media del resto de centrales nucleares en el mundo”. La primera de estas revisiones se prolongó durante tres años, entre 2006 y 2009, tras la que el Consejo de Seguridad Nuclear se mostró favorable para que la planta pudiera operar hasta 2019. Posteriormente, entre 2011 y 2012, Garoña realizó las pruebas de resistencia a raíz del accidente nuclear de Fukushima, y la tercera desde 2014 a 2017 y ha sido “rigurosa y exhaustiva”. - E.P.