El Ayuntamiento de Campezo, gobernado por la agrupación electoral Kaixo, ha tenido que reconstruir una intervención realizada en la calle La Berguilla, ya que al encargar una limpieza de cunetas las hizo en un lugar donde no existían, usando el terreno de los propietarios sin su consentimiento y provocando problemas de acceso a sus fincas a cuatro vecinos. El problema se suscitó cuando desde la corporación municipal se encargó la mencionada limpieza de cunetas con la idea de permitir el paso de agua en caso de tormentas y evitar de esa manera inundaciones.
En el caso concreto de estos cuatro vecinos, la intervención se llevó a cabo en la calle La Berguilla, desde Rosario y hasta donde finalizan las edificaciones, donde, según relata uno de los afectados, se realizó una cuneta que no existía anteriormente de un metro de profundidad por metro y medio de ancho, invadiendo las propiedades privadas sin que previamente sus dueños lo hubieran autorizado o se hubiera procedido a un proceso de expropiación. Esa cuneta no solo perjudicaba a los propietarios, sino que se hizo en la vía verde, lo que podía ocasionar un riesgo de accidentes a quienes pasaran por allí.
Los cuatro vecinos reaccionaron remitiendo un escrito al Ayuntamiento en el que trasladaban su “enérgica protesta” por la cuneta realizada y porque la actuación había invadido sus terrenos para construir “algo que antes no existía”. También reclamaban una urgente restitución a su estado anterior. Además, para que el asunto no se eternizara, uno de los perjudicados tomó la palabra en el Pleno municipal celebrado el pasado mes de enero, dejando constancia de la protesta en la sesión plenaria.
Al Ayuntamiento no le quedó otra que volver a gastar dinero para eliminar esa cuneta y reconstruir el lugar como estaba anteriormente, lo que podría haber supuesto un coste de unos 6.000 euros para las arcas municipales.