Vitoria - La reunión ayer de los tres alcaldes de Vitoria, Bilbao y San Sebastián, Gorka Urtaran, Juan Mari Aburto y Eneko Goia, respectivamente, con la consejera de Infraestructuras del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, en la sede del ejecutivo en Lakua se saldó con la unánime conclusión de todas las partes de “urgir” al ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, a un próximo encuentro de cara a conseguir que en el “plazo de un año” estén listos los proyectos constructivos para la entrada del Tren de Alta Velocidad en cada una de las tres capitales vascas. Teniendo en cuenta el carácter estratégico de los proyectos tanto en Vitoria, como Bilbao y Donostia, así como para el conjunto de Euskadi, la consejera y los alcaldes decidieron solicitar una reunión al ministro y “activar cuanto antes las comisiones interinstitucionales”, explicó el Ayuntamiento de Vitoria en un comunicado tras la celebración del encuentro. En este sentido, las cuatro entidades vascas reunidas ayer establecieron que a lo largo del año 2017 las comisiones interinstitucionales “deberán disponer de un proyecto constructivo definitivo para cada capital, preparado para su licitación de manera que estas obras vayan acompasadas con las de los ramales del nudo de Bergara”, concretaron. Es en el seno de estas comisiones donde el Gobierno Vasco, los ayuntamientos y el ministerio de Fomento “deberán consensuar los pasos a dar, siendo urgente la necesidad de establecer un calendario de fases de ejecución para cada obra, así como acordar el plan económico y financieros en cada uno de los casos”.
PROYECTO PARA 150 AÑOS La consejera y los alcaldes analizaron el anuncio que hizo el ministro respecto a los accesos del TAV a las capitales y constaron que la realidad de cada caso es diferente, “tanto por el volumen de usuarios como por la morfología de las parcelas”, así como por las mayores o menores dificultades en lo que respecta a cada caso en particular. Queda ahora el paso de “analizar las posibilidades técnicas y la viabilidad económico-financiera”. Gobierno Vasco y las entidades municipales se comprometieron a “estudiar e impulsar todas las acciones necesarias”, concretaron.
El alcalde gasteiztarra, Gorka Urtaran, hizo una posterior valoración positiva de la postura del nuevo ministro de Fomento, que apuesta por el soterramiento del TAV a su paso por Vitoria. “En este caso, la diferencia cualitativa es muy importante, puesto que ésta sería la solución definitiva frente al proyecto del anterior gobierno municipal, que estaba planteado como una solución provisional. Estamos hablando de un proyecto válido por lo menos para los próximos 150 años”, se aventuró a concretar el primer edil jeltzale. Como también sucedió en la entrevista con el ministro y la consejera de la pasada semana, eludió Urtaran entrar en la financiación y costes del proyecto, aludiendo a que esa cuestión sería ya “aventurar demasiado”, cuando el asunto ha vuelto a emerger al primer plano y se encuentra todavía en un estado embrionario a falta de mayores datos. En cualquier caso, instó al Gobierno central a pasar “de las buenas palabras a los hechos”. Aprovechó la valoración del encuentro Urtaran para hacer un llamamiento a las instituciones a seguir trabajando “de forma conjunta y con el nivel de complicidad de los últimos meses”. Puso de relieve que la solución de soterramiento que se está trabajando para la capital de Euskadi es “atractiva y más barata que la anterior propuesta por la zona norte de la ciudad”, en alusión a los planes que manejó su antecesor en el cargo, el popular Javier Maroto. Reconoció Urtaran también cómo tras esa obra va a quedar un espacio importante en la ciudad que sería “muy atractivo”. Se encargó de remarcar el primer edil vitoriano que el proyecto que plantean las instituciones vascas, propone conectar el TAV con otros medios de transporte públicos, de manera que se genere “intermodalidad” entre la futura estación del ferrocarril y los otros medios.
Por su parte, el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, señaló la necesidad de ir de la mano con el Gobierno Vasco al tratarse de una “infraestructura muy importante para la conectividad”, resaltó.