vitoria - Reunión a tres bandas para buscar soluciones consensuadas en Abetxuko. Por una parte, los representantes municipales de Alcaldía y Políticas Sociales, por otra los vecinos de la asociación Uribe Nogales y, cerrando el círculo, el presidente de la asociación gitana Gao Lacho Drom. El encuentro se celebró el pasado jueves por la tarde en los locales de la agrupación vecinal en Abetxuko y sirvió para acercar posturas y acordar que el espíritu de las protestas pacíficas debe continuar por el bien de una salida de los pichis pronta y sin consecuencias. Eso sí, los vecinos han acordado que las movilizaciones, que continuarán todos los días de la semana y con el mismo tono que el exhibido hasta ahora, aumentarán de formato.

En lugar de concentraciones, los residentes en Abetxuko llevarán a cabo manifestaciones en toda regla, pancartas e itinerario por todo el pueblo incluidos, con salida y llegada en los locales de la asociación Uribe Nogales. Hoy, a las 20.00 horas, dará comienzo la primera de ellas y ya se empieza a barajar fechas para celebrar una gran marcha de protesta que recorrerá el centro de la capital alavesa. Previsiblemente, esta movilización tendrá lugar, si nada se tuerce, dentro de una o dos semanas.

Mientras una representación de los vecinos de Abetxuko viajaba a Bilbao para sumarse a la manifestación convocada por los vecinos del barrio de Atxuri en contra de la delincuencia provocada por los miembros de este clan gitano, otro grupo se reunía con el director de Seguridad Ciudadana, José Antonio Anguiano, responsables municipales de Alcaldía y Políticas Sociales, y el presidente de la Asociación Gitana de Álava Gao Lacho Drom, Pascual Borja. Durante el encuentro se llevó a cabo un diagnóstico de la situación, se trasladó al Ayuntamiento gasteiztarra la auténtica magnitud del problema y sus posibles consecuencias, y se pusieron de manifiesto las sospechas de que el grupo pretende realizar un desembarco todavía mayor del actual en el barrio.

Borja, como representante de la comunidad gitana de Vitoria, que aglutina a más de 3.000 integrantes, obró como mediador y expuso experiencias previas similares acontecidas en otros lugares. Asimismo, subrayó que las protestas no pueden ni deben derivar en enfrentamientos y que cualquier actuación que se lleve a cabo tiene que discurrir por la senda de la más estricta legalidad. Consideró que el encuentro resultó “cordial” y el intercambio de impresiones “productivo”, si bien precisó que por el momento no se ha alcanzado ningún compromiso concreto.

saber estar y protesta “Siempre que se demanda nuestra presencia por parte de las instituciones, respondemos y en este caso, en la medida en la que se piense que podemos aportar algo, lo haremos. Pero no en clave de una familia concreta, como es el caso de Abetxuko, sino en clave de ciudad. Siempre hemos estado a favor de construir ciudad”, manifestó. El portavoz de Gao Lacho Drom descartó por ahora mantener una reunión con los pichis para conocer su postura o cuáles son los planes que manejan a corto plazo.

Oscar González, presidente de Uribe Nogales, apuntó que el saber estar de los vecinos debe primar por encima de todo, si bien destacó igualmente que el pueblo de Abetxuko tiene que ejercer su derecho a protestar para mostrar su rechazo y para hacer patente su malestar con esta situación. Apuntó el representante vecinal que con el fin de mantener la calma durante las movilizaciones, huir de las exaltaciones e impedir que se puedan perder los nervios en momentos puntuales de especial tensión, desde la asociación se está dando pie a que más gente del barrio colabore en el control de las mismas. Se trata de mantener un equilibrio que el alcalde, Gorka Urtaran, ya aplaudió recientemente.

Acción vecinal. La ocupación el pasado agosto de una vivienda por parte de miembros de los clanes gitanos de los ‘pichis’ y los ‘bartolos’, sumada al reciente intento de robo de una panadería de la zona, con las consiguientes increpaciones a la dependienta del establecimiento, elevaron muchos enteros la tensión en la zona y obligaron a buscar soluciones. A partir de entonces, además, los residentes iniciaron protestas pacíficas todos los días a las 20.00 horas para exigir la salida de este grupo de personas. Con sus acciones, lograron abortar nuevos intentos de ocupación.

Acción legal. La Fiscalía lleva varias semanas manos a la obra para tratar de agilizar los trámites legales para proceder cuanto antes al desalojo de estas personas, con recomendaciones al barrio para conseguir el objetivo. El vecindario confía, de acuerdo con las informaciones recibidas, en que la solución llegue antes de Navidad.

El presidente de la Asociación Gitana Gao Lacho Drom, mediador en el conflicto, defendió en el encuentro con los vecinos -una reunión “cordial”- que las protestas del pueblo no pueden ni deben derivar en enfrentamientos y que cualquier actuación que se lleve a cabo tiene que discurrir por la senda de la más estricta legalidad.

El presidente de la asociación vecinal Uribe Nogales informó de que, con el fin de mantener la calma durante las movilizaciones que se van a llevar a cabo, huir de exaltaciones e impedir que se puedan perder los nervios en momentos puntuales de especial tensión, se está tratando desde el colectivo que haya gente del barrio colaborando en el control de las protestas.