veteranos. Todavía está por inventarse algo mejor que un buen bocadillo y un tragito de vino o cerveza a media mañana para coger fuerzas. Bien lo saben los blusas y neskas veteranos, como los de la fotografía, que ayer reponían energías después de su paseíllo matinal antes de encarar el resto de la jornada del que fue el penúltimo día de La Blanca. Las fiestas afrontan hoy, para disgusto de muchos, el último día de jolgorio. Foto: DNA
