vitoria - En la concentración frente a la sede de la Diputación alavesa se reunieron unas pocas personas, pero detrás, respaldando la demanda, hay muchísimas. La iniciativa social para la apertura del geriátrico de Arana ha recabado ya 8.070 firmas. Y la intención es continuar luchando hasta conseguir que su petición se haga realidad. Un objetivo que ha incluido, además, la denuncia ante Emakunde de lo que los colectivos impulsores de la causa consideran un incumplimiento tanto del ejecutivo foral como del Gobierno Vasco “de la ley de servicios sociales en lo relativo al equilibrio de las prestaciones”. A su juicio, han quedado reducidas a ”ayudas económicas a cuidados en el entorno, produciéndose una grave afección en las mujeres”.
La consecuencia principal de la dinámica denunciada es, a juicio de los firmantes, el cierre del geriátrico de Arana y la Unidad de Día. Decisión que, a su vez, “repercute gravemente en la situación de discriminación que sufren las mujeres de Gasteiz tanto en lo relativo al reparto del trabajo de cuidados, como a su situación laboral”. El argumento tiene su lógica. “El hecho de recortar en servicios públicos supone familiarizar de nuevo el cuidado, quedando éste en manos de mujeres que se ven obligadas a hacerse cargo del cuidado de las personas mayores, sin recibir por ello ningún tipo de reconocimiento ni prestación alguna, ahondando en la desigualdad y en la situación de explotación que sufren”, advierten. Además, “supone recortar un sector profundamente feminizado que si bien es precario, también es donde fundamentalmente las mujeres encuentran empleo, agravando su exclusión”. - J.S.
