Un juzgado de Vitoria ha condenado a 9 meses de cárcel a dos mujeres acusadas de encerrar a sus hijas menores de edad dentro de un coche para irse a un bar en la capital alavesa.

VITORIA. El Ministerio Fiscal pedía dos años y cuatro meses de cárcel para las dos mujeres por abandono temporal de menores pero en el inicio del juicio esta mañana ha modificado su petición de pena lo que ha sido aceptado por todas las partes.

Una de las acusadas deberá también abonar una multa de 540 euros por un delito de resistencia y desobediencia grave a agentes de la autoridad y la otra deberá cumplir 60 días de trabajos en beneficio de la comunidad en ejecución de la pena.

Los hechos juzgados se remontan a la noche del 6 de septiembre de 2014 cuando las dos mujeres, según se afirmaba en el escrito de acusación del Ministerio Fiscal, dejaron a tres de sus hijas encerradas en el coche de una de ellas "siendo plenamente conscientes del peligro que eso suponía" para las niñas, que tenían menos de 7 años.

La mujeres se dirigieron a "algún establecimiento de hostelería" en la capital alavesa mientras que las niñas, "ante la tardanza en regresar de sus madres" - no se especifica el tiempo que estuvieron solas-, llamaron con un teléfono móvil que había en el coche al 112 para avisar que "estaban encerradas", "tenían hambre, y no tenían nada para comer", y que "se había hecho de noche".

Cuando las madres pretendieron volver al vehículo no eran capaces de localizar el lugar donde lo habían dejado estacionado "debido a su estado de embriaguez" por lo que solicitaron ayuda a varios viandantes en la zona, tal y como indica el Ministerio Público en el relato de hechos de su escrito que no ha modificado en la vista de hoy.

La Fiscalía también explicaba que una mujer se ofreció a avisar a la Policía, lo que provocó el enfado de una de las acusadas, que incluso la agredió. Sin embargo finalmente logró llamar a los agentes que acudieron al lugar y localizaron a las menores en el interior del vehículo.

Cuando los policías locales informaron a las mujeres de la apertura del atestado una de ellas comenzó a agredir a uno de los agentes.

El escrito de acusación también aseguraba que una de las acusadas había dejado esa misma mañana a otro hijo suyo menor de edad "sin supervisión adulta" y sin llaves del domicilio familiar, y que ante la ausencia de su madre acudió sobre las nueve de la noche a casa de un amigo, donde se quedó hasta que de madrugada llegó su padre.