Vitoria - Un aparatoso incendio declarado a media tarde de ayer en el polígono industrial Asparrondo de Araia devoró una parte importante del pabellón propiedad de la empresa Interenvases, dedicada a la gestión y el reciclaje de envases y residuos de envases industriales. Las llamas, cuyo origen todavía investigaban los servicios de emergencia al cierre de esta edición, provocaron una densa columna de humo negro visible desde gran parte de la Llanada alavesa y provocaron la intervención de los Bomberos de Gasteiz y del parque de Agurain, que tuvieron que trabajar durante horas para controlar totalmente la situación y evitar problemas añadidos. Un fuerte olor a plástico se extendió también por Araia y las localidades del entorno. Por fortuna, los daños fueron exclusivamente materiales, aunque cuantiosos, ya que los operarios que trabajan en la empresa pudieron abandonar a tiempo las instalaciones.

Según informaron fuentes de la investigación, los hechos se precipitaron a las 18.10 horas, cuando el teléfono de atención de emergencias 112 recibió el aviso de que se había desatado el incendio. Varios efectivos de la Ertzaintza y de los Bomberos de la capital alavesa, equipados con cuatro vehículos ligeros, dos bombas, un tanque y un vehículo escala, así como del cercano parque de Agurain, se movilizaron hasta el recinto industrial para tratar de controlar la situación. Un total de 15 medios humanos. También hizo lo propio al menos una ambulancia de Osakidetza para socorrer a los posibles heridos. El fuego, que pudo deberse a un cortocircuito según fuentes de los Bomberos, se dio por extinguido alrededor de las 19.20 horas.

La empresa, una división de Urbaser, se encuentra en la calle Bariceta de Asparrondo, muy cerca de Ametzaga, y comparte espacio con otras firmas de referencia como Hierros del Mediterráneo, Aceros de Araia o Nestlé. Según la primera evaluación de daños realizada por los Bomberos, quedó destruido a causa de las llamas el 50% del pabellón de Interenvases, lo que da fe de las dimensiones del fuego.

Interenvases, que inauguró el pabellón siniestrado en la tarde de ayer el 17 de enero de 2003, es una empresa creada en su día por iniciativa de Sader-Agaleus y Tecmed, y cuya actividad se vertebra en torno a tres actividades principales, la recogida de envases usados, su reciclaje y la preparación de aquéllos que reúnan las condiciones necesarias para su reutilización.

La empresa realizó entonces una inversión de casi tres millones de euros para poner en servicio esta factoría, que cuenta con casi 3.000 metros cuadrados y alberga no sólo las oficinas de Interenvases y un laboratorio para la caracterización de los productos, sino también dos líneas para triturar los residuos que llegan hasta la planta y lavar sus virutas. Habrá que esperar al balance definitivo de daños para saber cuántas de estas instalaciones pueden volver a ser útiles en un futuro, pero los Bomberos dan el edificio por “colapsado”.