Vitoria - Poco más de cinco meses después de que Foronda lanzara las primeras redes para pescar a una aerolínea low cost, las negociaciones están cerca de alcanzar la línea de meta con un gran favorito para hacerse con el contrato final. Como adelantó DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA el pasado miércoles, Ryanair se encuentra cerca de certificar su regreso al aeropuerto vitoriano con una propuesta por un mínimo de tres años y que según señalaron a este periódico fuentes cercanas a la negociación aventaja de forma considerable a las alternativas que otras compañías han puesto sobre la mesa.

A cambio, la aerolínea nacida en Irlanda se haría con un acuerdo que le reportaría al menos medio millón de euros para este curso y alrededor de un millón para 2017, y que son similares a las que durante los últimos meses ha venido reclamando para operar desde otros aeropuertos cercanos, como el de Burgos, con quien Ryanair también entabló conversaciones en septiembre del pasado año, antes de que se ofreciera a instalarse en Foronda. Las subvenciones para operar en Vitoria los próximos años serían, como la aerolínea califica habitualmente a estas inyecciones, destinadas al llamado “fondo de márketing”, que según la firma le permite reducir los precios de los billetes.

La Diputación acarreará con el principal peso económico de la operación, aunque tanto el Gobierno Vasco como el Ayuntamiento de Vitoria realizarán pequeñas aportaciones al ser parte, junto a la Cámara de Comercio de Álava, de la sociedad encargada de impulsar la terminal. En relación a las malas experiencia de Foronda con las low cost, como la espantada protagonizada en 2007 por Ryanair o la más reciente de Helitt, la diputada de Desarrollo Económico, Pilar García de Salazar, aseguraba en una entrevista a este periódico que “todo el mundo tiene que aprender de esas experiencias para que no se repitan”, y señalaba que “no tienen por qué repetirse porque los tiempos son distintos y la situación es distinta”.

Tras tantear a firmas como Norwegian, Vueling o Air Nostrum, y aunque la negociación del acuerdo para regresar a Foronda ha coincidido en el tiempo con la renovación de su convenio con el Gobierno de Cantabria para prolongar presencia en el aeropuerto santanderino -lo que despertó ciertas suspicacias en el transcurso de las conversaciones-, el regreso de Ryanair a Vitoria cuenta con todas las papeletas para materializarse.

Según señalan las mismas fuentes, el acuerdo se oficializará como tarde antes del verano, y a finales de año Foronda contaría de nuevo con una o dos líneas regulares para ofrecer a los pasajeros de Vitoria y sus alrededores. Es por estas fechas cuando compañías, aeropuertos y touroperadores concretan las operativas para la temporada de invierno, en la que por fin la terminal gasteiztarra tendrá algo que llevarse a la boca en materia de pasajeros más allá de los chárter y los vuelos del Imserso.

Aunque los destinos que la compañía irlandesa ofrecería desde Foronda no han trascendido, y se han estudiado opciones como Berlín, enlazar Vitoria con el aeropuerto londinense de Stansted sería la opción que cuenta con mayor peso, con la posibilidad de ofertar dos vuelos semanales entre marzo y octubre de 2017. La propuesta que Ryanair trasladó antes a las instituciones de Burgos contaba también con tres rutas semanales a Barcelona, pero por el momento se desconoce si el acuerdo con Foronda incluiría también esa posibilidad.