barrón - Acuaes, la empresa estatal que lleva a cabo el proyecto de regadío de Valles Alaveses junto a la Diputación Foral de Álava y la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), ha remitido ya toda la documentación a la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental y Medio Natural del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que es quien debe realizar la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto, paso previo para comenzar las obras. Dadas las circunstancias, Aguas de las Cuencas de España (Acuaes) ha accedido a contestar a las interrogantes planteadas por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA relativas al proceso que se ha seguido hasta ahora con este proyecto, así como su situación actual.
En primer término, el departamento técnico de la empresa pública ha confirmado que en el periodo correspondiente a la información pública del proyecto, se recibieron 41 escritos de alegaciones que, en su mayor parte (29), correspondieron a los vecinos de los pueblos de Barrón y Atiega, propietarios de fincas afectadas por la construcción del embalse de Barrón, y a las Juntas Administrativas de Atiega, Barrón, Guinea y Tuesta. Estas alegaciones fueron objeto de informe razonado por parte de Acuaes, con fecha 18 de noviembre de 2015, que ya fue enviado a quienes las presentaron.
Cumplido ese trámite, la Abogacía del Estado informó el pasado 21 de enero favorablemente al cumplimiento del trámite de información pública, continuando con la tramitación del proyecto así como del procedimiento expropiatorio necesario para su ejecución. Por esta razón, los propietarios de los terrenos afectados comenzarán a recibir las comunicaciones del proceso de expropiación en breve. En paralelo con toda esta tramitación cumplida, la CHE ha remitido el expediente a la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental y Medio Natural para que continúe con la preparación de la Declaración de Impacto Ambiental del Proyecto de Mejora y Modernización del Regadío de la zona regable de Valles Alaveses (zonas 1, 2, 3, 5, 6 y 7).
Ése es el estado en que se encuentra el proyecto en estos momentos. Un plan que se ha dilatado en el tiempo y en el que no han faltado voces, como las que se han manifestado estos días pasados en las reuniones celebradas en Espejo, con temores como que el agua tenía como finalidad otros usos y hasta otros destinatarios. Para tratar de aclarar el largo proceso que ha vivido el proyecto, Acuaes ha relatado la larga cadena de procedimientos que se han tenido que ir superando desde que en enero de 1999 la Diputación Foral de Álava redactó el Proyecto de Transformación en Regadío de Valles Alaveses. Se trataba de una infraestructura estratégica en opinión de la Administración provincial y por ello se dictó el Decreto Foral 53/1999 del 20 de abril por el que se declaraba de interés para Álava.
Pocos días después, el 4 de mayo de 1999, se sometió a información pública el Estudio de Impacto Ambiental de la construcción de balsas de acumulación en los términos municipales de Kuartango, Lantarón, Ribera Alta y Valdegovía. Estas balsas se contemplaban dentro del Plan General de Transformación en Regadío de la zona de Valles Alaveses, donde ya aparecía la balsa de Barrón con una capacidad de 4.320.700 metros cúbicos. Además contemplaba que la superficie potencialmente regable ascendía a 11.525,50 hectáreas, estructurándose en ocho zonas o unidades de actuación, en los términos de Armiñón, Kuartango, Iruña Oka, Lantarón, Ribera Alta, Ribera Baja y Valdegovía
El proceso administrativo continuó hasta que por la Ley 14/2000, de 29 de diciembre, se declaró de interés general en el País Vasco las obras de mejora y modernización de los regadíos de Valles Alaveses, Río Rojo-Berantevilla y Rioja Alavesa (Zona Este). Año y medio después, el 21 de junio de 2002 se suscribió un convenio de colaboración entre la Diputación, la CHE y la Sociedad Estatal Aguas de la Cuenca del Ebro S.A. (ahora Acuaes) para la elaboración del Proyecto de Desarrollo Constructivo de la Infraestructura Hidráulica para la Transformación en Regadío de la Zona de Valles Alaveses, Red en alta (Zona 4) basándose en el Proyecto de Transformación en Regadío de la Zona de Valles Alaveses del año 1999.
De esta manera se comienza el trabajo en esa mencionada Zona 4 que, según el propio proyecto, se sitúa al noroeste de la comarca Valles Alaveses. Comprende los terrenos de ambas márgenes del río Omecillo, entre Bóveda y Villanañe, sus valles laterales, en la margen izquierda, el de Valluerca, Quintanilla y Acebedo, Basabe, Pinedo; y en la margen derecha, los de Quejo, Nograro y Barrio. Además, se incluyen las fincas altas de la margen izquierda del río Omecillo, y del Valle del Ebro, situadas en Batxikabo. Según el mismo informe, en aquella zona existían 24 comunidades de regantes que, en la mayoría de los casos, utilizaban un sistema de riego por aspersión por tubería móvil, mediante la detracción de caudales a pie de parcela durante el período estival, único en que se produce el riego, ya que los cultivos de invierno (principalmente cereales) tienen cubiertas sus necesidades hídricas con las precipitaciones. Durante el período estival (de 1 de julio a 30 de septiembre) los agricultores extraen el agua directamente de los ríos mediante equipos de bombeo accionados generalmente mediante sus propios tractores. Los caudales circulantes, en numerosas ocasiones, son insuficientes o nulos. Esta obra supuso una inversión de 16.385.039 euros, con una financiación del 50% del Gobierno central (a través de AcuaEbro, ahora Acuaes) y el otro 50% de la Diputación. Una vez ejecutadas las obras de la red en alta de la Zona 4, se suscribió un convenio en fecha 24 de noviembre de 2010 entre AcuaEbro y la Diputación para la redacción del Proyecto de mejora y modernización del regadío de la zona regable de Valles Alaveses (Zonas 1,2,3,5,6,7 y 8), es decir en el resto de zonas en el Plan General de Transformación. Al año siguiente y en las sucesivas comisiones de seguimiento se eliminó la zona 8 y determinadas superficies de la zona 1.
Información remitida El 1 de octubre de 2012, el Ministerio de Agricultura remitió a la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental y Medio Natural el documento ambiental inicial junto con la solicitud del promotor de inicio de su tramitación de las zonas restantes. Tras dos años y medios de estudios y tramitaciones, el 22 de mayo de 2015, la Dirección General del Agua resolvió autorizar la incoación del expediente de información pública y unos meses después, el 17 de agosto de 2015, se publicó en el BOE el anuncio de la CHE por el que se sometía a información pública el Proyecto 10/14 de Mejora y Modernización del Regadío de la Zona Regable de Valles Alaveses (Zonas 1,2,3,5,6 y 7).
Asimismo, el 21 de agosto de 2015, la CHE remitió toda la documentación del proyecto a las administraciones públicas afectadas y personas interesadas que habían sido consultadas en la etapa de consultas previas de evaluación ambiental para que, en su caso, pudieran remitir sus observaciones y alegaciones.
Cubierto ese procedimiento, se llega a la situación actual, cuando el 21 de enero de 2016, la Abogacía del Estado informa favorablemente del cumplimiento del trámite de información pública del proyecto, y Acuaes considera procedente continuar con su tramitación así como del procedimiento expropiatorio para su ejecución.
Sin embargo habían transcurrido 16 años desde los primeros estudios de necesidades y en Espejo se puso de manifiesto que las necesidades de regadío eran bastante inferiores a las del proyecto inicial. En ese sentido Acuaes informa que la superficie total considerada en la actualidad que abarca el citado proyecto junto a la Zona 4, que no está incluida en el mismo, asciende a 7.060 hectáreas, superficie inferior a las 11.525,50 iniciales recogidas en el Proyecto de 1999 de Transformación en Regadío de la Zona de Valles Alaveses. Esta diferencia se debe a decisiones de la comisión de seguimiento, basadas en una adecuación de la superficie a la realidad de la zona y al establecimiento de unas franjas regables que sean viables económicamente.