gasteiz - Algo es algo. El no que la Asociación de Víctimas del 3 de Marzo recibió del Obispado para utilizar la iglesia de San Francisco como parte el memorial del 40º aniversario se ha transformado ahora en un sí con matices. Según anunció ayer el colectivo, la inauguración del citado memorial, que entre otras cosas acogerá durante todo el año acciones artísticas, audiovisuales y literarias, podrá celebrarse finalmente en el interior del templo de Zaramaga, cerrado al culto desde hace meses, aunque sólo “de forma puntual”, durante la mañana del 2 de marzo.
Martxoak 3 gestiona estos días con la fundación San Francisco el uso “de un espacio adecuado” de una parte de la iglesia para formar parte, aunque sea durante unas horas, de los distintos escenarios del barrio escogidos para acoger alguna de las propuestas conmemorativas previstas, aunque la agrupación confía en que “la decisión pueda ampliarse en el tiempo para que todas las personas que acudan a visitar el memorial a lo largo de este año puedan hacerlo en su integridad”, interior de la iglesia de San Francisco incluido.
Lo intentarán, de hecho, con un nuevo interlocutor, Juan Carlos Elizalde, que el próximo 12 de marzo se convertirá oficialmente en nuevo obispo de Vitoria. “Iniciaremos un diálogo con él y estamos seguros de que será fructífero”, auguró ayer la asociación en un comunicado. Tras unos meses en los que la posibilidad de utilizar San Francisco, el mismo templo que en 1976 acogiera la asamblea de trabajadores, se había estancado por el proceso de cambio al frente del obispado gasteiztarra, parece que la llegada de Elizalde, el rechazo social a la sorprendente decisión de no permitir su uso para el 40º aniversario, la mediación de representantes institucionales -tanto el diputado general como el alcalde de Gasteiz se han posicionado al respecto públicamente- y, sobre todo, la implicación de diversos colectivos de la ciudad ha logrado al menos separar un poco las aguas para abrir el camino hacia el interior del templo.
“Agradecemos la labor de las distintas autoridades y personas que han mediado para conseguirlo”, apunta Martxoak 3 tras asegurar que están encontrando “una buena disposición” por parte de la fundación San Francisco, el interlocutor con el que el obispo Asurmendi les emplazó a negociar para reconducir la situación y que “gestiona todo el templo a excepción de la capilla”.
“Consideramos de especial importancia encontrar un espacio adecuado por el valor simbólico de este templo para la memoria colectiva del 3 de marzo de 1976”, subraya la Asociación de Víctimas, que no ve ningún inconveniente en el hecho de que el memorial en recuerdo de los asesinatos de hace cuatro décadas comparta espacio con otras actividades en el interior del templo, como la colección permanente de belenes. “La utilización temporal del espacio elegido para culminar las visitas guiadas no sólo no es incompatible con cualquier actividad que pudiera desarrollarse en el recinto, como la colección de belenes, sino que incluso puede servir para que más personas conozcan esas actividades y puedan complementarse”, argumentan desde la organización del 40 aniversario de la matanza que acabó con la vida de cinco obreros. Así las cosas, los actos de conmemoración de la masacre, que se prolongarán durante todo el año, arrancarán un día antes de esa fecha, el 2 de marzo, con una “visita cero” al interior de la iglesia de San Francisco que, salvo giro de guión, no se repetiría en el resto de visitas guiadas, programadas para celebrarse los martes a las 18.00 horas, los viernes a la misma hora y los sábados a las 10.30 horas.
visitas guiadas El recorrido del memorial ha sido guionizado por el escritor Juan Ibarrondo, que en una entrevista publicada el pasado sábado por este periódico describía el memorial como “una máquina del tiempo en la que a través de distintas formas artísticas las personas visitantes se adentrarán en el día a día de un barrio obrero en aquella época y en el porqué y el cómo de sus luchas”.
“Habrá cinco espacios conceptuales y los recorreremos a través de unas audioguías, donde se escuchará el relato que he hecho. Serán el barrio, como lugar donde se reproduce la vida, pero también donde se tejen las conspiraciones; la fábrica, como el lugar de la lucha donde se produce el debate al pararse la producción. Después, habrá dos elementos más cotidianos, el mercadillo, donde se reunían las mujeres, que tuvieron un papel muy importante en la lucha, y la taberna, que intentaremos que sea como en aquel tiempo. Y para terminar, la iglesia, como lugar donde se produjo la masacre, pero también como el único punto de reunión donde se podían hacer asambleas”, explicaba Ibarrondo. Ese último punto, el de la iglesia, es el que más quebraderos de cabeza está causando a los responsables del memorial por la negativa del Obispado a ceder el templo todas las ocasiones que fuera necesario.
Además de Juan Ibarrondo, los actos de conmemoración del 3 de marzo cuentan con la participación de las artistas Txaro Arrazola, Irantzu Lekue, Sandra Santos, Marta Gil y Verónica Werckmeister, que con sendas intervenciones artísticas plasmarán su visión de una tragedia que asoló las calles del barrio de Zaramaga pero que, cuatro décadas después, continúa reclamando reparación y justicia por los asesinatos de los obreros Pedro María Martínez Ocio, Francisco Aznar Clemente, Romualdo Barroso Chaparro, José Castillo y Bienvenido Pereda.
Todo mientras la querella impulsada por la jueza argentina María Servini continúa abierta sin que el gobierno español acepte llevar a la justicia a responsables políticos como el exministro de Relaciones Sindicales Rodolfo Martín Villa.