La campaña de Navidad ya ha arrancado en Vitoria. Las calles se engalanan con luces, mercados y el tradicional Belén de La Florida. Es la estampa típica de estas fechas, pero no serán unas fiestas cualquiera. Es la primera vez que se votará entre olor a castañas asadas y turrones en los supermercados. Todo apunta a que las elecciones generales más reñidas de la historia inaugurarán una nueva era política, tras este 20D que augura el fin del bipartidismo. Es tiempo de cambio y el comercio minorista gasteiztarra también desea que la estrella de Oriente les guíe hacia un nuevo ciclo económico, por aquello de que tras una época de vacas flacas toca otra de vacas gordas, para así vivir su particular cuento de Navidad.

En concreto, el pequeño comercio espera que se obre el milagro y que pueda salir del oscuro túnel por el que atravesó el consumo desde que comenzara la recesión económica para que ésta sea la primera campaña de la consolidación de la reactivación de las compras. Las buenas nuevas no fallan al respecto. Según el Instituto Vasco de Estadística (Eustat), el índice del pequeño comercio de Álava registró un ascenso a precios constantes y en tasa interanual del 3,5% en el tercer trimestre, lo que lleva a augurar una esperanzadora campaña de ventas para este periodo. Es por eso que a poco menos de una semana para la llegada del Olentzero, los comerciantes afrontan con ilusión esta campaña navideña, en la que las tiendas se juegan gran parte de la facturación del año, confiando en que la buena racha del Black Friday, que dejó contentos a pequeños y grandes comercios, continúe.

Sin embargo, los profesionales del sector, a falta del cierre definitivo de la campaña, se muestran prudentes a la hora de hablar sobre estas perspectivas positivas en torno al consumo para estas fechas. “La mayoría de los comerciantes ven la campaña de Navidad todavía un poco plana, muy similar a la del año 2014”, explican portavoces de Gasteiz On, la asociación que desde el año 2002 agrupa al comercio, la hostelería y los servicios del centro urbano de Vitoria.

La cautela impera en esta fiesta del consumo que no ha hecho más que empezar, pero en la que, por lo general, todos los productos tienen una buena salida comercial. Si bien, la nota negativa de este periodo la ponen los descuentos y promociones, que a modo de rebajas adelantadas, plantean las grandes cadenas.

El pequeño comercio insiste en que éstas deben ponerse como siempre, en enero, y a ser posible tras la festividad de Reyes. Pero no siempre se puede. “Aunque más de la mitad dice que no van a hacer descuentos especiales antes de la temporada de rebajas, hay un porcentaje importante de establecimientos, aproximadamente un tercio, que posiblemente lancen reclamos”, puntualizan desde el gremio comercial. Uno de los que así lo hará será El soldadito de plomo, la tienda de Jacinto Benavente, especializada en comercio infantil, que también tiene un pequeño córner de moda para mujer. “La semana que viene, aprovecharé las vacaciones del colegio para hacer un 15% en toda la colección”, relata su propietaria Aida Galar, a quien le funcionó “muy bien” el viernes de descuentos del Black Friday. Un éxito, que según la encuesta realizada por Gasteiz On generó en las tiendas casi un 60% más de ventas, y que vino de perlas para cuadrar un mes de noviembre que no había sido bueno. Si bien, no es oro todo lo que reluce, ya que la nueva iniciativa comercial también ha traído consigo un lado negativo. “No sé si tiene algo que ver que la gente adelantó las compras a ese día y ahora esperan a última hora para hacer los regalos, pero, por lo general, diciembre baja las dos primeras semanas”, afirma Galar, quien añade que las compras navideñas que tienen siempre más tirón en el Olentzero son los juguetes, en detrimento del textil, que en esta época suele ser “un complemento” a dichos obsequios.

De hecho, lo que se vende durante este mes y en enero representa para los comercios que se dedican a la venta de ropa y calzado un 20% de sus ventas anuales, mientras que para las jugueterías, la cifra sube hasta un espectacular 40% del volumen de negocio que pueden generar en un año. Los niños son los reyes de estas fiestas y los primeros a los que se decide hacer los regalos.

“Habrá que valorar al final de la campaña, pero sí que parece que puede haber más movimiento”, destaca Pilar Sarasola, propietaria junto a sus hijos de la juguetería Jostamendi Gasteiz-Toy Planet. Ocho clientes en la cola, esperando a ser atendidos por tres de sus dependientas daban cuenta del ajetreo que se traen a poco menos de una semana para la llegada del carbonero más bonachón. “Los días que más ajetreo hay son los lunes. Hasta ahora llegaban los previsores, como los abuelos, y a partir de ahora vendrán todo tipo de clientes”, añade esta amable mujer, con más de 40 años de experiencia en esta juguetería familiar de Cercas Bajas, que para animar todavía más las ventas hace un 5% de descuento acumulado en la tarjeta, para todas las marcas de su gran tienda.

Los más rezagados Menos prisas se dan los adultos a la hora de comprar sus detalles. “Los niños son lo primero. Hay muy poca gente que se adelanta a los regalos. La próxima semana vendrán todos a la vez, pero esperamos que sea una buena campaña y que si las noticias se cumplen, se note la recuperación”, explican Esther y Carmen, propietarias de la céntrica tienda de ropa y calzado Paso de cebra, de General Álava, cuyo escaparate es una buena muestra del esfuerzo por mantener la ilusión y la tradición de Navidad para favorecer la dinamización comercial de las calles gasteiztarras. No en vano, la planta de arriba de sus vidrieras desde las 18.00 horas se transforma en una proyección de imágenes, que lleva el lema La ilusión nos mueve y que participa en los premios Visual Sariak 2015, que del 7 al 22 de diciembre convoca la Cámara de Comercio de Álava.

Ellas, al igual que la mayoría del comercio minorista, no pone el cebo de los descuentos para animar las ventas. “La mayoría de las franquicias trabajan para las promociones, pero la clave de nuestra diferenciación es que trabajamos con marcas exclusivas. Y que recibimos producto nuevo constantemente para refrescarnos cada poco tiempo”, añaden. Unas grandes cajas de cartón en medio de su pasillo con nuevo stock, recién llegado, daban fe de ello.

Lo mismo le pasa a Saint Tropez, el establecimiento de la calle Fueros, especializado en el estilo romántico y elegante, tan propio del glamour de la ciudad francesa que da nombre a su joven comercio. “No hacemos descuentos en Navidad porque es una línea delgada, propia de las franquicias, que queremos no cruzar”, matiza la propietaria de este espacio, Eva Ortiz de Zárate. Desde su inauguración en octubre de 2014 sólo hacen las rebajas de enero o julio, más los descuentos del Black Friday, que notaron “bastante” debido a la buena aceptación que tuvieron. Aún así no les va mal, gracias al santo y seña de su negocio: calidad, pero poca cantidad. De cada prenda hay pocas unidades para que luego no las lleve puestas media ciudad. “Esta semana empieza a haber movimiento y lo gordo será el fin de semana”, añade esta gasteiztarra.

Donde también creen que habrá más clientes dispuestos a irse de compras navideñas este mismo fin de semana es en la joyería Martínez, perteneciente a una saga familiar con más de 70 años de trayectoria en la capital alavesa. Su tienda veterana es la de Ortiz de Zárate, aunque en la de Dendaraba ya llevan la friolera de 27 años. “Creo que esta Navidad será mejor que la pasada y que la anterior. Notamos que viene un poquito más de gente porque la tendencia es ese crecimiento”, asegura José Mari Martínez de Baroja, regente de este establecimiento junto a su hermana Maite, quienes recomiendan no dejar los regalos para última hora.

“La gente tiene que adelantar las compras porque luego cuando vienen a por el colgante que vieron en el escaparate hace 20 días no está”. Ambos hermanos tienen un deseo. “Ojalá que vaya mejor esta Navidad”. Un sueño compartido por muchos de sus compañeros de profesión. Por eso, ahora que llega la fiesta de las compras es el momento de apostar por Vitoria para que su comercio local remonte las ventas y haga realidad su particular cuento de Navidad.

Ventas. La experiencia dicta que esta campaña de Navidad y las primeras semanas de rebajas constituyen el 20% de las ventas del comercio textil.

Niños. La estacionalidad de las ventas de juguetes dejan en las fechas ideadas para Olentzero, Papá Noel y los Reyes Magos casi la mitad de la facturación de los comercios especializados.