gasteiz - Con dos años de retraso y unos cuantos más de gravámenes sobre la vivienda inflados, por fin la Diputación alavesa anunció el miércoles que va a aprobar en el primer trimestre de 2016 los nuevos valores catastrales que permitirán retocar a la baja el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Sin embargo, el alcalde de Vitoria advirtió ayer de que, a pesar de esta actualización, los recibos de la contribución urbana no bajarán para los propietarios de viviendas e inmuebles, salvo en correcciones puntuales. Gorka Urtaran asegura que con la mala situación económica del Ayuntamiento, el erario público no se puede permitir una merma de la recaudación procedente del impuesto conocido como contribución urbana.
Estas declaraciones llegan un día después de que el diputado foral de Hacienda y Finanzas, José Luis Cimiano, ante las Juntas Generales de Álava, afirmara que la revisión de los valores catastrales ha sido una de las primeras decisiones tomadas y que debería llevarse a cabo de manera urgente, tratando de recuperar el tiempo perdido en los últimos años. Los valores catastrales vigentes actualmente en Gasteiz fueron aprobados en el año 2004, cuando el mercado inmobiliario registraba máximos históricos, tanto en número de compraventas, como en el precio de la vivienda. Según la normativa foral, durante el año 2013 deberían haber entrado en vigor los nuevos valores catastrales que, sin embargo, no fueron actualizados por el anterior ejecutivo foral, acumulando un retraso de dos años. “Estamos ante un notable incumplimiento, más teniendo en cuenta la importante caída del mercado inmobiliario experimentada en los últimos años”, señaló Cimiano. Ahora, el trabajo técnico ha dado como resultado la aprobación de una primera ponencia provisional, aprobada mediante Orden Foral el pasado 30 de octubre.
En Gasteiz, las quejas por el pago del IBI se suceden desde hace años. La plataforma en defensa de un IBI más justo ha salido a la calle en numerosas ocasiones para exigir a las instituciones alavesas que adecúen el pago del impuesto al valor real de las casas a día de hoy, ya que tras la caída del mercado inmobiliario, en Vitoria se siguen abonando recibos por cuantía superior al valor de las propiedades. Pese a ello, parece que los nuevos valores catastrales no van a repercutir en los recibos. - R. Rz. de G.