Nueva oficina para acoger a las víctimas de violencia de género

El programa ya se puso en marcha de forma interna tras el verano y supone una mejora sustancial en la detección de casos de violencia y el apoyo a los procesos de desvinculación y recuperación. Con este programa, los servicios sociales cuentan con mejores herramientas para identificar situaciones de violencia de género y disponen de un equipo específico para ayudar a aquellas mujeres que quieran iniciar una nueva vida lejos del maltrato.

El proceso integral de acogida y acompañamiento que proporciona Onartuz dividido en cinco fases: la detección de situaciones de violencia de género, el diagnóstico de cara a la identificación de la mujer como víctima y su voluntad de romper la relación con el agresor, el trabajo de una ruptura evolutiva, el apoyo en la desvinculación y la transición hacia una vida autónoma y, por último, el seguimiento.

“Las diferentes formas que puede tomar la violencia de género, como maltrato físico, psíquico, social, económico y sexual, tienen secuelas en todos los ámbitos de la vida diaria, creando situaciones de extrema indefensión a quienes la sufren”, señaló ayer el alcalde vitoriano, Gorka Urtaran, en torno a un problema “que nos compete a todos, y especialmente a nosotros, los hombres. Es una violencia -continuó- que asesina, que mata, y desde las instituciones podemos y debemos facilitar apoyo y recursos para combatir esa lacra”.

Desde la red de los Servicios Sociales, del de Igualdad y la Policía Local, el Ayuntamiento ofrece una serie de respuestas, que incluyen recursos de acogida en las situaciones de ruptura de la relación de pareja, así como atención psicológica, orientación jurídica y medidas de protección en caso de que sea necesario.

Además del servicio Onartuz, el Ayuntamiento sacó ayer a concurso el Centro de Acogida Inmediata para mujeres víctimas de violencia de género para el próximo año, un recurso que cuenta con doce plazas y que en 2014 atendió a 30 mujeres y 26 menores y cuyo precio de licitación es de algo más de 700.000 euros. El CAI ofrece, desde 2011, una acogida inmediata, temporal y accesible las 24 horas del día y los 365 días del año a aquellas víctimas que se ven obligadas a abandonar el domicilio de manera urgente.

La apertura de la oficina de Onartuz se produce en un año en el que las estadísticas han encendido las alarmas en la ciudad. Hasta octubre se han registrado en la ciudad 112 denuncias por violencia de género, una veintena más que en el mismo periodo de 2014, un dato sobre el que ayer Urtaran quiso hacer hincapié.

Por otro lado, con motivo de la celebración, el próximo 25 de noviembre, del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, la Diputación alavesa ha puesto a disposición de todos los ciudadanos la imagen del punto lila, símbolo del rechazo a las agresiones de género.

“Mostrar este símbolo públicamente implica un compromiso activo contra este tipo de violencia cuyo origen se encuentra en la desigualdad entre mujeres y hombres”, señala la Diputación, que pide a los alaveses que durante muestren el punto lila “en los pies de firma de vuestros correos, en vuestras cartas, en vuestras instalaciones, en vuestra web, en las redes sociales y en los lugares que consideréis oportuno”.

entrega de premios beldur barik. El Ayuntamiento de Vitoria entregó ayer los premios Beldur Barik a trabajos audiovisuales que reflejan el compromiso personal y colectivo para superar las diferentes formas de violencia hacia las mujeres y para construir unas relaciones libres, respetuosas, igualitarias, diversas y no sexistas. En Vitoria concurrieron más de 200 jóvenes con un total de veintiséis proyectos. Foto: Jorge Muñoz