Labastida celebra sus fiestas de Acción de Gracias, o del Cristo, desde hoy y hasta el lunes, con un intenso programa que en esta ocasión ha sido fruto del acuerdo entre el Ayuntamiento y todas las asociaciones de la localidad, participantes en una Comisión de Festejos, creada tras las elecciones municipales.

La alcaldesa, Laura Pérez Borinaga, confirma que el programa de estas Fiestas del Cristo se ha elaborado junto con la Comisión que se creó y que también terminó de preparar las fiestas de agosto, de las que una parte ya había sido elaborada por el anterior equipo de gobierno. En éstas, sin embargo, el programa ha sido preparado íntegramente por el actual gabinete, “pero no lo hemos hecho solos, sino con una Comisión en la que han participado todas las asociaciones de Labastida. Ahí han estado Marrate, que es la asociación cultural-musical del pueblo; la Cofradía de la Vera Cruz, que representa lo religioso; la Asociación de Vecinos del municipio; las asociaciones integradas por grupos de amigos; la hostelería; la Asociación de Mayores; la dirección de la ikastola; la AMPA de la escuela, y los representantes del equipo de fútbol y otras asociaciones deportivas”.

Este año se mantienen los actos más tradicionales. No obstante, hay muchas novedades. Entre ellas, se ha cambiado el orden de algunas actividades, como la degustación de vino y choripán, que prepara la Asociación de Jubilados San Ginés. En esta edición se ha adelantado a las 12.30 de este mediodía, antes del txupinazo, para que la gente vaya acudiendo antes “y pueda haber más ambientillo al comienzo de fiestas”, relata la primera edil.

También se ha incluido en esos primeros momentos de la fiesta, como novedad, una cucaña, ya que en fiestas de Reliquias, de agosto, tuvo mucho éxito. En esta ocasión sólo se colgará un jamón, aunque en las anteriores hubo dos, uno donado por el Ayuntamiento y otro por una empresa. Para esta tarde se han puesto en marcha más actos que no se habían programado otros años.

Para empezar habrá cena de cuadrillas. En estas fiestas no había comida o cena como sucede en agosto, que suele ser multitudinaria. “Es cierto que en este tiempo hace frío y a la gente le apetece menos salir a la calle, pero lo hemos tratado de hacer más atractivo para que la gente pueda acudir con un menú muy asequible, de 15 euros, para que todos nos podamos juntar en el Jatorrena”, destaca la alcaldesa. Tras la cena se ha previsto verbena en la terraza del Petralanda, que está cubierto y que sólo necesita la música y un cañón de aire para atraer a la gente y eso permite que pueda acudir gente de todas las edades. Por otra parte también se han añadido al programa las dianas con los gaiteros, que no había en las fiestas del Cristo y su presencia en la cata y la degustación de sopas de ajo.

En cuanto al tercer y último día, el lunes, que antes sólo programaba misa de difuntos y un lunch ofrecido por el Ayuntamiento, cambiará este año con un homenaje al vecino y a la vecina de más edad del municipio, algo que se celebrará por vez primera. Asimismo, por la tarde, después del concurso de tartas, que hace Acobasa y la chocolatada, que ofrece la asociación Marrate, en la plaza, se ha previsto una exhibición de los alumnos de la Escuela de Pelota del club Matximbrao en el Frontón Viejo, quienes también ofrecerán una degustación del Pintxo Campeón de Álava, del año 2013, del bar Erkiaga, de Vitoria, que se llama Silencio, para lograr fondos para facilitar la continuidad de la escuela.