vitoria - Álava contabiliza a lo largo y ancho de su geografía 29 espacios naturales protegidos por su carácter excepcional y por albergar especies de fauna y flora de especial interés en el ámbito europeo. 29 áreas que abarcan cerca del 30% de la superficie total del territorio, un simple registro que demuestra su peso, y que están incluidas en la Red Natura 2000, el principal instrumento para la conservación de la naturaleza dentro de la Unión Europea (UE). La zona húmeda de Salburua, Aizkorri-Aratz o los robledales de Urkabustaiz son sólo tres de sus ejemplos más ilustres.

Álava ha puesto ahora su punto de mira en otro entorno que, como estos tres, destaca por su rica biodiversidad, los Montes de Iturrieta, la Sierra de Entzia y sus estribaciones, un espacio que el pasado 6 de octubre fue declarado Zona de Especial Conservación (ZEC) por el Gobierno Vasco. La Diputación, a quien corresponde la competencia de articular las actuaciones que garanticen esa protección, aprobará hoy en Consejo las medidas de gestión y conservación de la flamante ZEC para los próximos seis años. Una batería de acciones que cuenta con un presupuesto estimado de 791.480 euros. Las más costosas, valoradas en 273.000, estarán destinadas a la restauración medioambiental de la zona y al reforzamiento de la conectividad ecológica. En algunos casos, serán puestas en marcha de forma inmediata, según confirmaron ayer fuentes forales a este periódico.

La nueva ZEC establece una superficie de protección de 10.006 hectáreas, lo que la convierte en la segunda más extensa del territorio tras el entorno del Gorbeia, que suma más de 13.000, aunque cabe recordar que este último espacio natural se encuentra a caballo entre Álava y Bizkaia. El entorno de Entzia disfruta de un paisaje vegetal dominado por amplios bosques de frondosas, superficies de hayedo que se extienden por la altiplanicie en cotas medias y altas alternadas con brezales y pastizales montanos. El quejigal, entretanto, domina en Entzia a menor altitud, acompañado por pastos mesófilos, matorrales y enebrales, originados por el uso forestal y ganadero que históricamente se ha desarrollado en la zona. Un paisaje heterogéneo cuya conservación ha sido posible en gran medida gracias al trabajo de las distintas administraciones y que ha permitido a la nueva ZEC albergar una rica comunidad faunística, donde sobresalen las aves rupícolas y las rapaces forestales, y que según el Gobierno Vasco constituye “posiblemente” la más abundante y diversa de toda la CAV.

Entre las medidas planteadas por la Diputación alavesa para conservar este privilegiado espacio, destaca la posibilidad de habilitar en la Granja de Iturrieta, previo análisis, un nuevo centro de visitantes acompañado de un programa de interpretación que se centrará en los bosques vascos y en la explotación agroforestal sostenible.

El ente foral tiene previstas también otras actividades de concienciación y participación ciudadana que, entre otras acciones, pasan por diseñar un nuevo itinerario didáctico que permita a los visitantes observar árboles singulares, así como los distintos tipos de bosques de la zona. El Departamento de Medio Ambiente, para poner en marcha esta iniciativa, estudia aprovechar el recorrido ya existente en Munain-Okariz.

La Ejecutivo foral articulará al mismo tiempo numerosas actuaciones para proteger los hábitats de especies protegidas, tales como el alimoche común, el halcón peregrino, el águila real o el búho real, especialmente en zonas de nidificación, y acometerá una quincena de acciones para conservar los anfibios que viven en Entzia, como el tritón alpino, el sapo corredor, la rana ágil o la rana patilarga. La Diputación implementará al mismo tiempo otra docena de medidas encaminadas a proteger a los murciélagos y a concienciar a la población sobre su importancia.

En lo que respecta a la restauración medioambiental, el Gobierno realizará un inventario de focos de vertidos incontrolados que serán limpiados y restaurados e impulsará la recuperación de las zonas afectadas por otros impactos como las erosiones, las antiguas graveras o las canteras. Finalmente, destacan dentro del programa de actuaciones la elaboración de un mapa de puntos negros para la mortandad no natural de la fauna silvestre y las actuaciones en favor de la conectividad ecológica, tanto dentro de la propia ZEC Entzia como entre la ZEC y otros espacios protegidos.

La medida estrella en este ámbito será la construcción del primer ecoducto de Euskadi, un paso específico para la fauna acondicionado con vegetación que atravesará la A-1 y las vías del tren para conectar la Sierra de Entzia con el parque natural Aizkorri-Aratz. Este falso túnel, del que ya dio cuenta el diputado José Antonio Galera en la presentación de las líneas maestras de su departamento, tendrá cuarenta metros de ancho y 125 metros de longitud y estará cubierto con tierra vegetal y plantas.