vitoria - Cuando las vacas dejaron de dar leche, la Administración señaló a los funcionarios como uno de los agujeros por los que se iba el dinero. Así empezó una campaña de recortes, precarización y eventualidad, encaminada en ocasiones a la privatización de servicios básicos, liderada por el Gobierno central y que el entramado estatal fue cumpliendo, sobre todo donde gobernaba el PP. Pero esa época ya pasó. Ayer, la Diputación de Álava aprobó el decreto que hace efectivo el acuerdo alcanzado con los sindicatos para restituir las condiciones de los empleados públicos tras las restricciones de la pasada legislatura.
El decreto conlleva tres cambios relevantes. El primero, la reforma de la normativa de 2012 que regula la prestación en situaciones de incapacidad temporal para ampliar los supuestos excepcionales que dan derecho al pago del cien por cien del salario en caso de baja por enfermedad. La segunda medida deja sin efecto la decisión adoptada por el anterior gobierno foral de eliminar las vacaciones por antigüedad. Por último, se aprueba la extensión a los cinco días laborales de la semana de flexibilidad de que disponen los funcionarios con reducción de jornada por cuidado de hijos o de personas dependientes. - J.S.