vitoria - Han pasado ya cuatro décadas desde que la Plaza de Abastos empezara a llenar los estómagos de los vitorianos en su actual ubicación. El pasado mes de enero cumplía su aniversario, pero el gerente del recinto, Eloy López de Foronda, apuntaba por aquellas fechas que prefería aguardar a que la totalidad de la reforma quedara completada para realizar un acto de celebración que sirviera también como evento oficial de reinauguración.
Hace cuatro décadas, Abastos abrió sus puertas al público apenas dos días después de bajar la persiana al anterior recinto, ubicado en la plaza de Los Fueros y construido en 1889. El 13 de enero de 1975, el espacio ocupado tiempo atrás por los cuarteles de artillería dejaba pasar a los clientes por primera vez con una sorprendente novedad en la ciudad: las escaleras mecánicas. Fue el primer edificio de la capital alavesa en instalarlas. Su pistoletazo de salida coincidió con el primer día de la semana. Un lunes en el que, según recuerdan los veteranos del lugar, la plaza se llenó para disfrutar de los productos, de las escaleras mecánicas, de la calefacción y del hilo musical. Diseñado por el arquitecto Ángel Esteve Jaquotot, de cuyo lápiz surgió también la antigua plaza del ganado germen del actual Buesa Arena, el mercado del centro de Vitoria estaba ideado para que ningún puesto sobresaliera por encima del resto ni en espacio ni en accesibilidad.
El arquitecto, por cierto, mostraría después su disconformidad con la forma en la que el edificio se había ido reformando, decantándose por pintar el hormigón en lugar de limpiarlo. El deteriorado aspecto exterior que la fachada inyectaba a la plaza se convirtieron, ya desde hace una década, en motivo de reclamo por parte de los dueños de los locales, que reclamaban una renovación profunda. Las obras han alcanzado los 8,7 millones de euros, pero han supuesto un soplo de aire fresco para un espacio que ha recibido también un nuevo compañero de viaje con la amplia sección de deportes de un referente como El Corte Inglés. Como explicaba hace unos días en este periódico el gerente de la plaza, todo apunta a que, salvo sorpresa, el colofón de la reforma, la pasarela con el citado centro comercial, estará disponible para la campaña de Navidad. - D.O.