Artziniega - Las urnas no le posicionaron como lista más votada, pero el juego democrático -con el apoyo del PP- hizo que su partido, el PNV, mantuviera la Alcaldía de Artziniega, para pesar de EH Bildu. Se trata de Iñigo Gómez, un licenciado en Derecho Económico de 44 años que se ha hecho con el sillón de alcalde, tras cuatro años de concejal, y que se estrena en el cargo pero no en la administración pública, ya que durante casi dos décadas ha sido funcionario en el ayuntamiento del vecino municipio vizcaíno de Gordexola.

Quizás por ello su insistencia en organizar el Ayuntamiento de forma que sea más rápido, ágil y eficaz en sus respuestas, eliminando burocracia. Un hecho palpable en la reducción de las áreas municipales de seis a tres. La obra más inmediata bajo su mandato será la mejora de las aceras desde el Ayuntamiento hasta el colegio público Arteko Gure Ama, para la que existe ayuda foral. Sin embargo, los retos de legislatura son mucho más ambiciosos, y no se le escapa que tendrán que ser capaces de atraer financiación externa, pese al “buen estado de salud” en el que se ha encontrado las arcas.

Tras el pleno de funcionamiento municipal, el Ayuntamiento ha quedado organizado en tres grandes departamentos, que aglutinan 26 subáreas, frente a los seis de la pasada legislatura. ¿A qué se ha debido esta reducción?

-Más que subáreas yo las definiría como temas a abordar. Así, dentro de Organización y Cuentas están englobadas hacienda, personal, participación, transparencia, comunicación y nuevas tecnologías. En Territorio, abordaremos temas de urbanismo y medio ambiente, montes, obras, agricultura y ganadería, pueblos, casco histórico, desarrollo local y turismo. En Ciudadanía, todo lo referente a acción social, cultura, educación, deporte, juventud, fiestas, igualdad, personas mayores, asociaciones y euskera. El objetivo no es otro que ser más eficientes y ágiles y no tener tantas comisiones. No por un motivo de ahorro en el pago de dietas, que a esas, por lo menos en lo que a los concejales del PNV se refiere, ya que en el caso del resto es algo que tendría que consultar, ya renunciamos la legislatura pasada.

En todas estas comisiones, al igual que en la Junta de Gobierno Local, usted ostenta la presidencia, pero se trata de órganos en los que están representadas las tres fuerzas que integran la Corporación. ¿Es un reflejo de que quiere trabajar por consenso?

-Efectivamente, en la Junta de Gobierno Local estamos dos concejales del PNV, uno de EH Bildu y otro del PP, y en las tres comisiones informativas de área hay dos representantes del PNV, dos de EH Bildu y uno del PP. No es algo nuevo. Ya en la pasada legislatura trabajamos así y funcionó muy bien, porque resulta más operativo. Trabajar por consenso es una de mis intenciones. De hecho, en la reunión de portavoces que hemos celebrado, ya les he transmitido a todos mi plan de legislatura, con unos objetivos muy marcados, porque mi apuesta es la participación, no por, sino para lograr metas.

La periodicidad de los plenos va a ser mensual, a excepción de julio, agosto y diciembre que no habrá, pero lo que sorprende es que cinco de ellos serán matinales y los otros cuatro vespertinos. ¿A qué se ha debido esta distinción?

-La propuesta jeltzale era que fueran cada dos meses para ser más operativos, porque por la dinámica de este Ayuntamiento lo creíamos suficiente, ya que no deja de ser un órgano de carácter más formal que de contenido. Sin embargo, EH Bildu y PP han creído más conveniente la opción mensual y así ha quedado. Por lo que respecta al horario, el hecho de que los plenos de febrero, abril, junio, septiembre y noviembre se vayan a celebrar a las 09.00 horas, y los de enero, marzo, mayo y octubre, a las 19.00 horas, viene avalado por un intento de facilitar la asistencia vecinal. No obstante, yo en este asunto soy un tanto escéptico, porque ya la pasada legislatura se hizo y no venía mucha gente, no se si por qué no interesaban los temas a tratar o porqué, pero así fue. También es cierto que los de tarde se pusieron a las 20.00 horas, y que ahora se han adelantado una hora. Ya veremos los resultados.

Antes ha comentado que ha presentado a la oposición su plan de legislatura con objetivos muy marcados. ¿Cuál considera que será el proyecto estrella de estos próximos cuatro años o, dicho de otra forma, cuáles son sus principales retos u objetivos a alcanzar?

-En cuanto a obras, sin duda alguna, intervenir en el camino a La Venta para recuperar el antiguo acceso como alternativa de paseo en llano, tras haber restaurado ya el puente medieval de Barratxi. Uno de los más antiguos del Valle de Ayala, sino es el que más, y que llevaba mucho tiempo hundido. Otro reto importante es dotar a este municipio de un Gaztegune, porque la juventud no dispone de un lugar de reunión para su esparcimiento y ocio, y para ello habrá que buscar algún local municipal para rehabilitar. Tampoco quiero dejarme la necesidad de un centro de atención diurna nuevo, porque el actual se ha quedado pequeño en plazas. Sabemos que son retos ambiciosos y que habrá que buscar financiación externa para, por lo menos, intentarlo. Por otro lado, queremos dar una vuelta a la comunicación con la ciudadanía y la participación vecinal, de forma que podamos captar la mayor información posible de nuestro vecindario para contrastar propuestas y necesidades reales. En definitiva, acercar el Ayuntamiento a la ciudadanía.

¿Y a corto plazo?

-Lo más inmediato va a ser el inicio de ejecución de las aceras desde el Ayuntamiento hasta el colegio público Arteko Gure Ama, para los que ya tenemos una ayuda foral a añadir a los 300.000 euros que aporta el Ayuntamiento, así como el asfaltado de la Avenida de Gernika y, con prioridad, las diversas obras de mejora que se van a efectuar en el Colegio, tales como la eliminación de escaleras en el acceso a la cocina, la reparación de canalones y aleros, o el acondicionamiento de los baños del edificio de primaria, de cara a que estén terminadas para el regreso de los escolares a las aulas, tras las vacaciones estivales.

¿Otros objetivos?

-Algunos temas contemplados en el presupuesto de este año son el cambio de la instalación de agua caliente y calefacción del polideportivo, la colocación de semáforos de aviso en los sistemas de entrada al casco histórico o las obras de acometida de agua a la Venta y Gordeliz, y los trabajos de control de termitas. Además, esta la mejora y renovación de los columpios en la Plaza Garay, o el acondicionamiento y mejora de la zona de la rotonda del Ayuntamiento, así como el cambio del sistema de depuración de las piscinas municipales, el hormigonado del camino al depósito de agua de Retes de Tudela, la instalación de una mesa de ping pong en la zona del polideportivo, o el acondicionamiento de la segunda planta de la Casa Consistorial, una vez terminadas las obras de instalación del ascensor.

Este año cuentan con un presupuesto de 1,7 millones de euros, un 3,1% superior al de 2014. ¿Cómo calificaría la salud de las arcas que se ha encontrado?

-Para empezar la deuda es cero, y sin ningún tipo de crédito a afrontar, al que se le añade un importante remanente de tesorería. En este sentido, creo que a todas luces se puede afirmar que la situación económica del Ayuntamiento de Artziniega es saludable.