un tiempo esplendoroso dio la bienvenida a las numerosas personas que se acercaron ayer a Labastida para vivir una nueva jornada del programa Bodegas a pie de calle, evento organizado por la Asociación de Comerciantes de Labastida (Acobasa), en colaboración con el Ayuntamiento de este municipio de Rioja Alavesa. Un total de nueve bodegas de la localidad secundaron el llamamiento realizado desde el gremio comercial para celebrar una jornada festiva en torno al vino que se elabora en la localidad y al propio comercio, que abrió sus puertas, como una forma de promocionar el enoturismo, clave en esa zona.

Así, hubo stands, y muy concurridos, de Solagüen, Gontés, Mitarte, Ibaidondo, Marqués de Carrión, Remelluri, Aimarez, Torres y Agrícola Labastida. A ellas, además, se sumó la hostelería local con una amplia oferta de otros muchos vinos que se elaboran en Labastida y en la comarca. Por eso, vecinos y visitantes se fueron repartiendo por los diferentes puestos repartidos por una larga ruta en forma de s, que empezaba en la plaza Jai Alai, subía por La Florida, pasaba por la plaza de La Paz y recorría finalmente la calle Frontín, en cuyos tenderetes se sirvieron decenas de botellas de los mejores caldos, mientras los bodegueros, los enólogos o los encargados daban explicaciones a los interesados sobre dónde estaban sus instalaciones, sus formas de elaborar o si la vendimia vendría adelantada o atrasada por culpa era del cambio climático. A todo esto, una charanga recorría toda la zona formando corrillos para el deleite de la gente.

La flamante nueva alcaldesa, Laura Pérez Borinaga, afirmaba que este tipo de iniciativas “promocionan las bodegas de Labastida y con ello logran que la gente conozca mejor nuestro pueblo y a sus gentes”. Y refiriéndose a la colaboración entre la asociación empresarial y la institución local, destacó la importancia que eso tiene para la celebración de estos eventos.

En los diferentes stands se fueron agolpando los visitantes para poder disfrutar del mayor número de vinos y, como es natural, se hablaba de lo que pasará este año en los viñedos. “En principio se presenta bien. Durante la brotación el número de racimos que hemos visto está muy equilibrado y con buen aspecto por lo que la cosecha no tendrá merma, en principio. Esto nos hace pensar que la calidad puede ser muy buena, aunque todavía es pronto y queda mucha campaña en el campo ” se oía contar en el stand de Agrícola Labastida.

La campaña del año pasado, la que se degustaba como vino joven ayer, era “muy bien valorada, porque es un vino muy redondo, muy afrutado y la gente disfruta mucho con estos vinos” explicaban en Solagüen. Y es que los vinos de Labastida tienen su qué, “son vinos personales, distintos, tenemos aquí un microclima y una altitud muy propensa para vinos de alta calidad, gracias a estar entre Sierra Cantabria y el río Ebro”.