Vitoria. Tras la reunión del Consejo de Diputados, De Andrés ha comparecido acompañado por el responsable foral de Hacienda, Aitor Uribesalgo, para aportar más detalles sobre la reforma fiscal que ha propuesto su gobierno, y que está pendiente de tramitación en las Juntas Generales.Esta reforma, que De Andrés quiere aprobar antes de las elecciones de mayo, consiste en una rebaja de impuestos "progresiva", que supondría un ahorro para las rentas medias de 473 euros (21.000 euros netos anuales, del que se beneficiaría el 51 % de los contribuyentes alaveses), lo que equivaldría a un incremento salarial del 2 %, ha destacado Uribesalgo.

La propuesta del gobierno foral alavés persigue bajar el IRPF del 23 al 21 por ciento a las personas con ingresos inferiores a 15.500 euros y del 28 al 27 por ciento a quienes tengan rentas entre 15.500 y 31.100 euros.

También prevé aumentar las deducciones fiscales por hijo y no cargar las plusvalías a los casos de dación en pago que tengan que liquidar deudas hipotecarias.De Andrés ha recordado que planteó esta reforma el año pasado y los grupos de la oposición le dijeron que "no era el momento".

Ha opinado que ahora sí que lo es y ha considerado que es mejor que los ciudadanos sepan ya, antes de las elecciones, qué compromiso tiene cada partido sobre este tema.Ha explicado que él está con la gente en la calle y que le dicen "una y otra vez" que "no se puede soportar la presión fiscal que tiene ahora mismo el trabajador y que hay que empezar a moderarla"."Yo creo que tienen razón.

Hubo un momento en el que para pagar los compromisos de las administraciones se tuvo que pedir un esfuerzo especial a mucha gente que cobraba una pequeña renta o una renta media, y ahora es el momento de reconducir las cosas porque ya se está resolviendo el problema", ha incidido.

De Andrés ha pedido a los grupos que no pongan excusas para debatir esta propuesta de reforma fiscal antes de las elecciones y ha recordado que el plazo de enmiendas acaba el viernes, y que todavía habría tiempo para que fuera aprobada antes de la disolución de la cámara foral, en los plenos del 25 o del 30 de marzo."Sí que hay tiempo, sólo hace falta la voluntad de querer implantar estas medidas ya", ha concluido.