Gasteiz - El consejo de administración de la sociedad municipal Ensanche 21, que celebró ayer una reunión extraordinaria para autorizar a su gerente a iniciar el proceso judicial para desalojar a las familias que ocupan varias de sus viviendas en Errekaleor y la Avenida de Olarizu, cumplió con lo previsto y dio vía libre a los desahucios de un listado de casi una veintena de pisos, doce de ellos en Errekaleor.

Eso sí, no se recurrirá a la vía penal y Ensanche 21 se limitará a expulsar a las familias que han ocupado estas viviendas, una serie de desahucios motivados por la situación precariedad de las viviendas, según sus promotores.

La decisión adoptada ayer se basa en un informe de la Policía Local elaborado el pasado 5 de febrero a raíz del incendio que se produjo tres días antes en una vivienda del barrio, concretamente en el número 5. Según los agentes, “los daños (en el inmueble) son de gran envergadura y algunas de las viviendas son utilizadas por los okupas como vertederos llenos de basura y de cosas de procedencia de contenedores de basura que recogen estas personas”. Tres perros murieron en el incendio del piso, ocupado por indigentes. Las llamas, que afectaron también al piso superior, fueron sofocadas por los bomberos, que posteriormente permitieron a los ocupantes de la vivienda que recuperasen sus enseres.

El informe afirma además que “las viviendas no ofrecen ninguna garantía de salubridad e higiene”, y que “la corriente eléctrica llega a la vivienda mediante empalmes de los cables a los contadores de la vía pública hechos de manera totalmente artesanal y con ningún conocimiento técnico al respecto, generando un grave peligro a todos los habitantes de la casa”.

Por otro lado, Ensanche 21 no sabe cuántos de sus pisos en el barrio vitoriano están ocupados, pues los técnicos de la empresa no entraron al mismo por razones de seguridad. Así, se ha hecho una estimación aproximada según la cual en Errekaleor hay una docena de pisos ocupados, más otros cuatro en la Avenida de Olarizu y dos más en el Casco Viejo.

La sociedad municipal dispone en total de medio millar de pisos vacíos repartidos por toda la ciudad, un patrimonio que en breve pasará a formar parte a todos los efectos del Ayuntamiento. PP y PNV pactaron la disolución de la empresa y poco a poco se van dando los pasos para que así sea, aunque en principio el acuerdo alcanzado estipulaba que la extinción debía haber producido a finales de 2014. El pasado día 5 el consejo de administración abordó el aumento del capital social de la sociedad municipal mediante la conversión de dividendos no abonados en capital social, con el fin de tapar la deuda consolidada de 18,5 millones de euros y dejar todo en orden antes de proceder a la liquidación. Este viernes el consejo se volverá a reunir para seguir perfilando la disolución.

La empresa, que nació para gestionar el crecimiento de la ciudad por Salburua, Zabalgana y Aretxabaleta, ha visto comprometida su sostenibilidad financiera por varios factores. El primero, la crisis económica que ha congelado el mercado inmobiliario y la promociones de vivienda en la ciudad, aunque ha habido más cuestiones que han comprometido el equilibrio financiero de la empresa. En ese sentido, a Ensanche 21 los últimos gobiernos municipales le han detraído cerca de cien millones de euros para diversos proyectos. - T.D.