- Frío hasta decir basta. El mercurio de los termómetros se agazapó ayer ante una meteorología propia de latitudes polares. No en vano, los registros ambientales obtenidos en el territorio histórico determinaron temperaturas heladoras, con el bajo cero como epígrafe principal de un clima siberiano que amenaza con otorgar rango perenne a la nevada que aún cubre buena parte de la fisonomía provincial. Todo ello, además, compartió protagonismo con los daños colaterales derivados de las heladas que se adueñaron de Álava, ya que los hospitales gasteiztarras tuvieron otra vez trabajo extra con decenas de casos de contusiones, golpes y roturas ligados a múltiples caídas y resbalones en un firme propio de una pista de patinaje. Al menos, dos de las víctimas sufren traumatismos craneoencefálicos

Iturrieta, a medio camino entre la Llanada y el valle de Arana, apenas si alcanzaban los siete grados bajo cero a las 13.00 horas. Casi primavera, si se tiene en cuenta que el termómetro se ancló en los -15 durante la noche. Otros puntos del territorio también se tuvieron que embozar en capas y capas de ropa para hacer frente a un frío helador. Por ejemplo, el observatorio de Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) en el aeropuerto de Foronda registró la noche más fría de los últimos cuatro años, con -7,7, aún lejos de los -21 grados que se soportaron en el mismo lugar un 4 de enero de 1971.

Sea como fuere, el listado de temperaturas de la citada agencia señala a Navarrete como la localidad que más frío pasó ayer en el conjunto de Euskadi, con 14 grados bajo cero. En Etura, llegaron a los -11,7. En Ozaeta, también tiritaron con ganas, con 10,6 grados bajo cero. En Agurain, los termómetros oficialmente se quedaron en -10,4 y en Alegría-Dulantzi, en -9,6. En Arkaute, por su parte, el frío se tradujo en 9,2 grados negativos. Por todo ello, y dadas las circunstancias, el Departamento vasco de Seguridad decidió mantener activado el aviso amarillo por heladas en Álava hasta las 10.00 horas de hoy.

A pesar del bonito contraste que ofrecen los restos de la nevada caída la pasada semana, ésta y sus consecuencias, derivadas de las heladas que congelan el agua del deshielo, están provocando un nutrido parte de bajas médicas. Según los datos facilitados por el Hospital Universitario de Álava (HUA), un total de 33 personas recibieron ayer asistencia sanitaria en las Urgencias de los dos hospitales gasteiztarras. Todo ello debido a caídas en las calles por el firme helado.

En concreto, a lo largo de la mañana los profesionales del Hospital Santiago dieron asistencia a 21 pacientes, muchos con fracturas de extremidades. Dos de ellos han sufrido traumatismos craneoencefálicos. Parecida situación se vivió en Txagorritxu, con la visita de 12 transeúntes con cuadros similares.

En otro orden de cosas, y tal y como informa la Agencia Efe, los trabajadores de la empresa UTE Álava Oeste 2013, encargada del mantenimiento y conservación de las carreteras, iniciaron ayer una serie de paros parciales para protestar por sus “pésimas condiciones” laborales. Estos trabajadores, que entre otras tareas se encargan de retirar la nieve y el hielo de las carreteras, tienen turnos de 12 horas y, según denuncian, se les paga “a precios ridículos, dado el esfuerzo y la peligrosidad de estas labores”. Además, ELA explicó que la empresa los tiene catalogados como peones “aunque trabajan con maquinaria pesada y en el convenio de la construcción su categoría es la de oficiales”.

Los trabajadores tenían previsto iniciar las movilizaciones de protesta el pasado martes pero decidieron posponerlas hasta esta semana por el temporal de nieve que ha azotado Euskadi en los últimos días. De esta manera la plantilla de la UTE Álava Oeste 2013 realizó ayer paros entre las 14.00 y las 16.00 horas, que se reeditarán hoy y mañana. Además se concentrarán frente al pabellón que Diputación tiene en la calle Urartea.