Gasteiz- Además del elevado coste de ocho millones de euros, el doble de lo presupuestado; de que se construyó en una zona prohibida, de forma ilegal, y de que nunca ha funcionado como tanque de tormentas, ahora parece que el depósito de Yurre tampoco puede utilizarse para regar las huertas de Abetxuko -como dijo el gobierno de Javier Maroto- a no ser que se inyecte más dinero. ¿Cuánto? Esa es la incógnita que, según denunció ayer el PNV, el gabinete del PP aún no ha despejado ni al resto de partidos ni a la ciudadanía. Si a ello se suma que el riego de los huertos de Basaldea es con carácter temporal, “¿tiene sentido gastarse otros 400.000 euros -por poner un ejemplo-, si es únicamente provisional?”, se pregunta el concejal jeltzale Álvaro Iturritxa. “Que hablen claro, dejen de mentir y digan cuánto va a costar de verdad”, reclama Iturritxa.

El grupo nacionalista realizó ayer estas declaraciones, un día después de que la sociedad de aguas Amvisa abordase el polémico asunto del depósito de Yurre del que se va conociendo un dislate tras otro. En el fondo del asunto está qué hacer con una infraestructura “inservible” para su finalidad inicial (acumular agua de tormentas) y que ahora se temen en el Ayuntamiento que sea “inservible” también para regar las huertas de Abetxuko porque esta labor requeriría gastar más dinero para poner a punto una maquinaria a la que en todos estos años, una década ya, no se le ha dado ningún mantenimiento. Según explicaron Iturritxa y su compañera Blanca Guinea, hasta el propio gerente de Amvisa se resiste a que la infraestructura pase a manos de la sociedad de aguas de Vitoria, ya que su gestión llevaría al menos un gasto de mantenimiento de 180.000 euros anuales, al margen de las mejoras en seguridad que habría que adoptar para acondicionar la infraestructura a las exigencias de Red Eléctrica de España (REE). E incluso así, aun poniendo el tanque a punto, tampoco podría utilizarse como depósito de tormentas.

Así que Vitoria tiene ahora un depósito de aguas de ocho millones de euros; con maquinaria obsoleta; una sola bomba en lugar de dos; lleno de agua por culpa de las filtraciones del río Zadorra, cuando debería de estar vacío y listo para recoger el agua de lluvia, e ilegal porque no cumple los requisitos de seguridad que exige la compañía eléctrica, empresa que ya advirtió desde el inicio de la obra, allá por 2006, de que la construcción bajo una red de cables de alta tensión no era posible debido a su peligrosidad.

Cuando hace unas semanas el escándalo de Yurre se destapó, el gobierno de Maroto se desentendió de aquel primer informe de 2006 que ya alertaba de lo inoportuno de la obra. Explicó que la notificación no llegó al ejecutivo de Alfonso Alonso -entonces alcalde- porque a un alto funcionario se le olvidó comunicar el hecho a sus superiores. Una explicación que nadie en la oposición se creyó. El gobierno de Maroto sí admitió, en cambio, que la segunda notificación de Red Eléctrica llegó a sus manos y que, tras hablar con la compañía, ésta les comunicó que no era necesario derribar la obra. Avanzó entonces el PP en sede municipal que, ante la imposibilidad de utilizar el tanque como depósito de tormentas, se usaría para regar las huertas de Abetxuko de manera sólo provisional. Sin embargo, ayer el PNV mostró un documento que contradice esta idea. Un escrito enviado por el Ayuntamiento a la Confederación Hidrográfica del Ebro en el que se apunta que finalmente, el depósito no se va a destinar al uso para el que fue construido. Para los nacionalistas, esto es otra prueba de que, de nuevo, el gobierno ha mentido y de que nunca han tenido intención de retomar más adelante la posibilidad de que algún día se convierta en un depósito para almacenar agua cuando haya tormentas. Y si no se utiliza como depósito de tormentas, tampoco ha aclarado el PP si la ciudad tendrá que devolver a la UE las ayudas que dio a Gasteiz para financiar parte de la obra. Demasiadas preguntas sin respuesta. “Ante esta evidente falta de transparencia y el afán del PP por negar cualquier responsabilidad vamos a insistir en obtener toda la información posible”, advirtió Iturritxa.

Hasta ahora. Se sabía que el depósito de Yurre costó ocho millones de euros, el doble de lo presupuestado, que nunca ha funcionado, que no sirve como depósito de tormentas y que está construido bajo una red eléctrica de alto voltaje de forma ilegal, algo de lo que ya advirtió en 2006 y 2012 Red Eléctrica.

A partir de ahora. En duda está si se va a usar para regar huertas porque habría que inyectar más dinero para ponerlo a punto y si habrá que devolver las ayudas europeas de la obra.