gasteiz/agurain - A primera hora de la mañana de ayer, la nieve aún era materia de postal en buena parte de la Llanada y Zuia. Municipios como Salvatierra y Murgia amanecieron bajo un tupido manto blanco surgido tras las nevadas de las últimas horas. No así en Gasteiz, donde las calles apenas si mostraban rastros de las precipitaciones pasadas. Pese a las estampas típicamente invernales, la red principal de carreteras del territorio no sufrió incidencias reseñables, mientras que las vías secundarias fueron recuperando la normalidad tras una jornada dominical trufada de puertos impracticables para la circulación. Lo de ayer fue, sin duda, la calma que precede a la tempestad. No en vano, para mañana se esperan nuevas nevadas que, una vez contempladas las alarmas activadas, parece que sí que crearán problemas.

Al menos, eso es lo que cree el Departamento vasco de Seguridad, que ayer anunció la habilitación de la alerta naranja -sólo superada por la de color rojo a la hora de clasificar los fenómenos meteorológicos adversos- ante el riesgo de sufrir fuertes nevadas. También son de la misma opinión Iberdrola y la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), que ayer decidieron aumentar el ritmo de desembale del pantano de Ullibarri Ganboa hasta los 65 metros cúbicos por segundo “a la vista de las nuevas previsiones meteorológicas para los próximos días.”

Éstas avisan de la presunta incidencia de los copos, que llegarán de la mano de una masa de aire polar y, por ende, de un descalabro de las temperaturas, por lo que el riesgo ya no sólo se centrará en la nieve, ya que tendrá que hacer caso a la posibilidad de fuertes heladas en buena parte de la fisonomía provincial.

En concreto, tal y como apunta la Agencia Efe, la Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología del Gobierno Vasco activará hoy desde las tres de la madrugada un aviso amarillo por nieve. Se espera que la cota se sitúe en torno a los 300 ó 400 metros de altitud. De cumplirse el escenario previsto, las nevadas acumularán espesores de entre dos y ocho centímetros a 600 metros y de entre cinco a 20 a 1.000. Pero no será lo único en acontecer en lo meteorológico, ya que mañana, la situación se recrudecerá. De ahí la alerta naranja. De hecho, se espera que pueda nevar desde la mañana a una altura de 100 metros. Se anuncian tormentas con granizo en Ayala y unos espesores de nieve de entre cinco y 30 centímetros a 600 metros. Ese mismo día se activará un aviso amarillo por heladas moderadas y en zonas de montaña.

Además, Euskalmet (Agencia Vasca de Meteorología) pronostica para el jueves y viernes que la cota de nieve se sitúe en los 100 metros, ocasionalmente a nivel del mar, con heladas débiles en el interior y moderadas en Álava y áreas de montaña. Asimismo, alerta de la entrada de una masa de aire polar con viento del noreste, conocido como viento francés. Este frente provocará temperaturas muy frías, con máximas de cero grados en el interior. Las mínimas se situarán en torno a los -5 grados.

En cualquier caso, todo ello está por llegar. Lo ocurrido ayer se resume en un parte de incidencias minimizado en relación a lo vivido en días precedentes, donde casi todos los puertos de la red secundaria se encontraban cerrados al tráfico. A media tarde sólo permanecía cerrado el puerto de Orduña. Por la mañana se registraron problemas en Bernedo, Herrera, Opakua y Orduña, donde se prohibió la circulación hasta que las quitanieves lograron limpiar el firme de las precipitaciones acumuladas durante horas. Por Zaldiaran y Altube hubo que utilizar cadenas puntualmente.

Pese a la mejoría, la Diputación decidió mantener activado el Programa Operativo de Vialidad Invernal en su fase de emergencia, con 53 operarios y 19 máquinas quitanieves. Aparte, los Bomberos de la capital alavesa aún continuaron durante la jornada de ayer remediando los efectos de las crecidas y del temporal. Según la información facilitada por el Ayuntamiento de la capital alavesa, los profesionales del retén acudieron a las cuatro de la madrugada a la calle Juana Jugan porque se habían inundado un sótano, el foso de un ascensor y la sala de calderas por un problema en la activación de las bombas de achique. También realizaron labores de achique de agua a lo largo del sábado en diferentes puntos, tanto de la ciudad como de la provincia, en las localidades de Gamarra Mayor, Espejo, Murgia, Santa Cruz de Campezo, Gobeo, Labastida, Baños de Ebro, así como en locales de las calles de Vitoria-Gasteiz, La Peña, Larragana, Gernikako Arbola y La Baranda.