vitoria - Sí, hace un frío que levanta la boina, más incluso que ayer, cosa lógica por otra parte en estas fechas, pero el temporal de nieve ya pasó. La prueba es que el aviso amarillo de estos días previos ha quedado desactivado porque las previsiones meteorológicas no podían ser más contundentes. El blanco elemento da tregua al fin al este de Álava y sus puertos, las zonas que realmente han conocido la crudeza del primer azote de este invierno. Eso sí, el termómetro no comenzará a remontar hasta la semana que viene y tampoco lo hará con demasiadas alegrías, con mínimas por debajo del cero y máximas que no superarán los siete grados en la capital.

Álava se despidió ayer del temporal con imágenes de postal, como las de esta página, y algún que otro contratiempo en la calzada a primeras horas del día. Los puertos de Aiurdin, Orduña y Herrera permanecieron cerrados al tráfico hasta las cuatro de la tarde y Opakua puso la barrera a camiones y obligó a los turismos a circular con cadenas. También hubo que utilizarlas durante gran parte de la jornada en Salinas y Bernedo, mientras que se impuso la máxima precaución en la carretera N-1 entre Navarra y Vitoria y entre Vitoria y Miranda, así como en el alto de Etxegarate. Cuatro ojos que igualmente hubo que aplicar en la AP-1 entre Eskoriatza y Foronda y entre Burgos y Armiñón, en Altube, el alto de Barazar y desde Gasteiz hasta Armiñón.