vitoria - El PP dio ayer marcha atrás y finalmente ha excluido del pliego de condiciones de la última fase de la reforma del Palacio Europa la elaboración de 6.000 folletos propagandísticos con el eslogan Hacemos Green el Palacio de Congresos Europa, una acción a mayor gloria del equipo de gobierno que se pretendía sufragar con dinero público. Cuando salió a la luz la intención del gabinete de Javier Maroto de incluir la campaña publicitaria en un pliego de obra pública, los tres grupos de la oposición pidieron la comparecencia urgente del concejal de Urbanismo, Miguel Garnica, que ayer anunció la modificación de tan llamativo pliego de condiciones, cuyo presupuesto asciende a casi 600.000 euros.
Al margen de lo extraordinario del hecho en sí, llama la atención el que esta acción, que se pretendía poner en marcha el 1 de mayo, a escasos días de las elecciones municipales, se valorara con 20 puntos, mientras que la planificación de la obra contemplaba un tope de 14 puntos, la ejecución de la misma se valoraba en un máximo de 15, y la memoria técnica ponía en juego 29 puntos. De hecho, de un pliego de doce páginas sobre la reforma de las tres fachadas no cubiertas de vegetación del edificio, y que se revestirán de listones de madera, en tres se detallaban las condiciones que había de reunir la campaña de comunicación. Entre ellas, “diferentes soportes físicos y digitales que deberán tener con hilo conductor una imagen gráfica llamativa, deberá tener una gran presencia en calle, utilizar colores vivos y una tipografía grande y fácilmente legible”.
Orientada tanto al público en general como a los profesionales de la construcción del ámbito internacional, la publicidad debía editarse en castellano y euskera, y también en inglés en el caso de las acciones dirigidas al sector. En cuanto a los 6.000 folletos, debían constar de “una infografía del palacio de congresos Europa con el revestimiento de sus fachadas objeto del contrato, un corte de la fachada mostrando e interpretando las diferentes capas que componen las fachada actual más el nuevo revestimiento, información sobre las características de la madera utilizada e información sobre la mejora en el aislamiento térmico del edificio”.
El pliego detalla que, además, quien opte a la adjudicación deberá publicitar en la valla de la obra la imagen promocional, redactar una nota de prensa, elaborar un power point y un póster, y diseñar, organizar y realizar cinco visitas guiadas bilingües a la obra (una dirigida a la prensa y cuatro para público general) durante la fase de ejecución del proyecto. Los aspirantes a hacerse con el contrato también tenían que organizar y realizar “al menos una jornada técnica orientada a profesionales del sector”, y redactar un extenso artículo técnico destinado a explicar en revistas especializadas, “de tirada nacional o internacional”, el proyecto de revestimiento de las tres fachadas que salen a licitación. Además había que crear contenidos sobre el avance de la obra para colgarlos dos veces al mes en las redes sociales y en las cuentas del Ayuntamiento.
Ayer Garnica dijo, primero, que el pasado viernes la Junta de Gobierno Local aprobó rebajar la valoración de la campaña de 20 a 5 puntos, y aseguró que la puntuación inicial se había debido a un error, pues el pliego del 28 de noviembre repartía 99 puntos en lugar de los cien preceptivos. Sin embargo, en la rectificación del viernes también se repartían 99 puntos. En todo caso, visto el revuelo que ha levantado el pliego de condiciones, Garnica anunció que el PP retirará la campaña de comunicación del pliego en una Junta de Gobierno extraordinaria que, dijo, se iba a convocar lo antes posible. Será esta misma mañana, a primera hora, cuando el equipo de gobierno certifique su renuncia a la campaña de propaganda. Garnica lamentó tener que dar marcha atrás a una iniciativa que pretendía “dar a conocer un proyecto de envergadura”, pero el PP apostó por evitar “la polémica”.
“escándalo” De no hacerlo, advirtió el grupo municipal del PNV, la formación llevará el caso ante la Junta Electoral. El portavoz municipal jeltzale, Gorka Urtaran, calificó de “ilegal” el utilizar la inauguración de un edificio “para hacer campaña electoral”, y el edil de EH Bildu Antxon Belakortu calificó de “escándalo” el que se utilicen este tipo de “fórmulas para bordear la ley”. Belakortu se pronunciaba así porque en las fechas en las que estaba previsto lanzar la campaña los partidos no pueden realizar propaganda electoral.
Por su parte, el edil del PSE Juan Carlos Alonso recriminó a Garnica el haberse transmutado “de concejal de obras en concejal de propaganda”, y acusó al PP de querer “pagar una campaña de publicidad a cuenta del contribuyente”.