gasteiz - La asociación Euskararen Jatorria presentó ayer una querella contra la Diputación alavesa por prevaricación, al entender que dio por falsos los grafitos de Iruña-Veleia cuando no había unanimidad a este respecto en la comisión asesora que analizó los restos hallados por la empresa Lurmen.

Según Euskararen Jatorria, de los diez informes solicitados a la comisión solo uno llegó a entregarse oficialmente a la Diputación, y únicamente cinco de ellos aseguraban rotundamente que los grafitos eran falsos. Además, señalan los querellantes, tanto la comisión asesora como la Diputación se negaron a resolver científicamente la cuestión al denegar a Lurmen la posibilidad de datar un centenar de grafitos y hacer las catas controladas solicitadas a lo largo de 2008, que siguen sin hacerse al día de hoy.

La asociación argumenta además que la Diputación no ha probado ni la falsedad de los grafitos ni que Eliseo Gil sea el autor de las presuntas falsedades, e incluso hay indicios de que la institución foral ha limpiado algunas piezas.

Para Euskararen Jatorria, hay varias pruebas que avalan la veracidad de los grafitos, como la existencia de veinticuatro informes que defienden su veracidad, dos de ellos publicados en revistas científicas, y que aclaran “más del 90% de las palabras consideradas falsas”. Además, nuevos descubrimientos arqueológicos han venido a reforzar las tesis de Gil. - T.D.