la Asociación de Desarrollo Rural de la Llanada, ADR Lautada, ha convocado para este domingo la celebración del primer Día de la Llanada, Lautada Eguna, bajo el lema de Lautada bai! La jornada, que tendrá por escenario el polideportivo Landederra de Elburgo, estará constituida por una muestra de productos locales de la Llanada Alavesa y por la presentación de diferentes proyectos de comarca, contando con el interesante atractivo de un encuentro de las cinco formaciones corales que actualmente existen en la Llanada.

Este día, en palabras de la presidenta de la ADR Lautada, Nati López de Munain, “pretende ser una jornada festiva de unión y afirmación de la identidad de los pueblos de la Llanada, sin perder de vista su desarrollo económico y social”. En consecuencia, este encuentro tendrá como objetivo poner en valor los diversos aspectos comarcales, tanto culturales, como gastronómicos, turísticos, económicos o sociales, en un escaparate dirigido tanto a los propios vecinos de la Llanada, como a los visitantes de otras comarcas o territorios.

El Lautada Eguna comenzará a las diez y media de la mañana con la apertura de la muestra de productos gastronómicos y de artesanía de la comarca. En ese sentido, es preciso señalar que la ADR Lautada ha puesto en marcha durante este año, una iniciativa para fomentar la venta del producto local de la comarca, que ha constado de un puesto permanente en los mercados de Agurain, Araia y Alegría-Dulantzi, en los que se ofrecen los productos de la comarca directamente de los productores al consumidor. Asimismo, desde la Oficina de Turismo, ubicada en Agurain, también se ofrecen estos productos para aquellos turistas que visitan la Cuadrilla y que quieran adquirirlos.

Entre los productos que se podrán encontrar, se encuentra el queso de la Denominación de Origen Idiazabal, así como patatas, alubias, repostería, pan, sidra o embutidos, todos ellos producidos y elaborados en la zona. Estos mismos productos podrán encontrarse este domingo en Elburgo.

Según explica Nati López de Munain, “el consumo de productos procedentes de nuestro entorno geográfico, entre otras muchas ventajas, contribuye a mantener y desarrollar la economía de la zona, su tejido social y a preservar el medioambiente”. “Además de fomentar y consumir productos locales, lo que favorece una economía local más dinámica, con evidentes ventajas, tales como la preservación e, incluso, la creación de empleo en el propio entorno, la recuperación de los vínculos de los consumidores con la tierra y las personas que la cultivan, así como el conocimiento y la valoración del territorio y su gastronomía regional como un activo cultural”.

En ese sentido, desde la ADR Lautada se considera que, a nivel estrictamente económico, se debe impulsar con fuerza el turismo gastronómico, como una oportunidad de desarrollo. Por otra parte, se constata que consumir local permite conseguir en muchos casos precios más justos tanto para los productores como para los consumidores, debido a una reducción de los costes de transporte y almacenamiento, así como a una reducción de los intermediarios comerciales entre el productor y el consumidor final.

Como ha quedado dicho, el Lautada Eguna servirá también para la celebración del encuentro de los cinco coros de la Llanada. Estos son el Grupo Coral del Ayuntamiento de Elburgo, la Coral Alaia de Alegría-Dulantzi de voces blancas, la Agrupación Coral Eguzkilore de Agurain, Araiako Abesbatza, de Asparrena, y el coro Kataliturri de Barrundia. El evento tendrá lugar en la iglesia parroquial de San Pedro a las once y media. Ésta es la tercera edición de este encuentro coral. Las anteriores fueron en 2011 en Alegría-Dulantzi y el pasado año en Araia.

Tras el concierto, nuevamente en el polideportivo Landederra, se presentarán el proyecto de puesta en valor y recuperación del patrimonio de la Llanada, impulsado por la ADR Lautada, y la Red Terrae, en la que participa el Ayuntamiento de Elburgo. El primer proyecto pretende constituirse, a partir del patrimonio de los pueblos, en una herramienta para establecer una “cadena de valor”, la cual encamine el desarrollo de las acciones a la consecución de recursos, materiales y sociales, que a su vez sirvan de motor para la creación de nuevas iniciativas que generen nuevas dinámicas. Quiere conseguirse una generación de valor económico, social, emocional y cultural a partir del patrimonio construido, para el desarrollo sostenible de los núcleos rurales.