aestas alturas ya nadie duda que la combinación de vino de Rioja Alavesa y queso de Idiazabal forma una pareja impecable. Pero los alcaldes de los dos emblemáticos pueblos que son Elciego e Idiazabal querían ir algo más lejos y han estrechado su amistad y colaboración. Ayer fue un numeroso grupo de vecinos de la localidad guipuzcoana, encabezado por su alcalde, Ioritz Imaz, el que se desplazó hasta la villa del vino para disfrutar de una jornada de fiesta y de compartir productos.
Mientras los productores del exquisito queso iban llegando a Elciego, la embajada más madrugadora, los txistularis de esa localidad, comenzaron a las nueve y media de la mañana a ir desperezando a los vecinos para que salieran a las calles a disfrutar de una jornada de maridaje de los dos productos y de la fiesta. De esa forma, a las once y media estaba todo listo. En la plaza se habían instalado los puestos de quesos y de promoción de Idiazabal, así como los troncos que más adelante servirían para que los aizkolaris midieran sus fuerzas con las hachas. En el Ayuntamiento de Elciego, su alcalde, Luis Aldazabal, había colocado las banderas de las dos localidades y, a sus pies, los maestros asadores se pusieron a asar una ternera a la vieja usanza.
A esa cita no faltó la hostelería local. Los bares y restaurantes se habían sumado a la fiesta de celebración con numerosos pintxos elaborados en la noche anterior, pero entre todos ellos destacaban los platos de queso de Idiazabal, listos para ser ofrecidos a cuantos quisieran degustarlo "por cortesía de la casa y de los productores de queso".
Aldazabal actuó en todo momento como anfitrión y contaba que "esta es la devolución de la visita que hicimos desde Elciego a Idiazabal durante las fiestas de los sanblases, en la que llevamos nuestra cultura, nuestros productos como símbolo de unión y para darnos a conocer. En esta ocasión ellos vuelven con muchas ganas y estamos desbordados por la cantidad de gente que nos viene de Idiazabal y por cómo han preparado el día. Creo que son dos pueblos que tienen muchas cosas en común y que compartir; y son dos productos, el vino y el queso, que maridan de primera, aunque lo que mejor marida son las gentes de allá con las de Elciego".
Por su parte, Ioritz Imaz, alcalde de Idiazabal, señalaba que "el pueblo de Elciego, y especialmente su alcalde, fueron quienes se interesaron en un principio por hacer estos actos conjuntos. Somos dos pueblos que vemos que nuestro desarrollo está ligado a estas cosas, que tenemos productos que están muy bien vistos y son de muy buena calidad y sabemos que pueden ser motor para el desarrollo de nuestros pueblos. Elciego tiene una vida muy arraigada en el vino e Idiazabal es más industrial, pero sabemos que tenemos que preservar la actividad ganadera, especialmente los pastoreos, entre otras muchas razones porque estos buenos pastores son quienes nos dieron el nombre al pueblo".
A la fiesta se sumaron los vecinos y numerosos visitantes llegados de otros lugares, que pudieron disfrutar de la charla en los puestos, donde se podía degustar el queso y comprarlo y especialmente hablar de él, de sus cualidades y variedades.