el Centro de Interpretación Arqueológica del castro de Henaio de Dulantzi ha iniciado su programa de visitas. El complejo, que cuenta con una reproducción de dos casas, similares a las que existían allí en la Edad del Hierro, y dos tramos de muralla de una longitud de cuatro metros cada uno, permanecerá abierto hasta el mes de octubre todos los sábados y domingos de 11.00 a 14.00 horas. En los meses de julio y agosto también se podrá visitar los miércoles. Todo ello se hace con el objetivo de dar a conocer la riqueza cultural de enclave ubicado en Dulantzi. Además, también se podrán contratar visitas fuera del programa según disponibilidad en la Oficina de Turismo de Agurain.
Este yacimiento arqueológico fue descubierto como poblado de la Edad del Hierro en una prospección por la zona llevada a cabo por Armando Llanos, María Nieves Urrutia y Jaime Fariña en el año 1968. Un análisis de los restos localizados puso de manifiesto su interés e importancia planteando su excavación, que se llevó a cabo entre los años 1969 y 1970. Los trabajos se realizaron sobre una de las terrazas de la parte alta del cerro. Se pudieron aislar tres niveles, de otras tantas fases de poblamiento. En el primero se vieron algunos muretes de piedra, que estaban muy deteriorados por las labores de labranza. En el siguiente, se puso al descubierto una de las plantas de las viviendas, que conservaba su trazado de planta circular. Bajo este nivel otro, que correspondía al primer asentamiento humano en el cerro, presentaba los restos de los hoyos para anclar los postes de madera de las primeras construcciones. Los materiales encontrados en estos niveles, una vez estudiados arqueológicamente y realizado su análisis radiocarbónico fecharon estas diferentes etapas de población con un origen de alrededor de los siglos XI-X antes de Cristo (Bronce Final) llegando a las últimas etapas en los siglos IV-III antes de Cristo (Hierro Final). Se puede calcular, por tanto, que el poblado tuvo una vida a lo largo de, aproximadamente, 800 años.
La empresa Sormen Creativos ha sido la encargada de llevar a cabo la musealización del castro de Henaio. De esta manera, el complejo se ha habilitado como atractivo turístico después de que en 2004 el Departamento de Cultura del Gobierno Vasco diera el visto bueno a la declaración de este elemento como Bien Cultural. La zona afectada por este tratamiento especial es un asentamiento fechado entre la Era del Bronce y las primeras etapas del Hierro.
El castro cuenta con la reproducción de dos casas, similares a las de la Edad de Hierro, aparecidas en las excavaciones. De planta circular, con un diámetro de seis metros y de 4,5 metros de altura, el recinto cuenta con paredes con estructura de postes verticales con cerramiento de palos en trabajo de cestería y manteado con mortero. Además se ha realizado la reproducción de dos tramos de la muralla en una longitud de ocho metros cada uno de ellos.
Situación privilegiada Parece ser que los habitantes que decidieron instalarse en el cerro eligieron la colina por sus fuertes pendientes por tres de sus lados, que además se reforzaron con una defensa artificial en forma de terrazas y muros, que lógicamente fueron más potentes, en su lado sur, que carecía de una defensa natural apropiada. Desde su altura se controlaba una zona de paso natural, en dirección este-oeste, así como aquellos que a través de los montes de Vitoria, hacían posible la entrada de gentes a la Llanada Alavesa, desde el sur.