AMURRIO - El concurso de ideas convocado por el Ayuntamiento de Amurrio de cara a hacerse con el proyecto más idóneo para hacer de la plaza San Antón de Amurrio un espacio cubierto multifuncional, ha recibido la friolera de 65 propuestas. Éstas han sido analizadas por un jurado experto para, en base a los criterios de valoración establecidos en los pliegos; es decir: calidad arquitectónica, adecuación al entorno e integración urbana; viabilidad y funcionabilidad; así como valores medioambientales y de sostenibilidad, seleccionar las cinco mejores, que se someterán a la opinión vecinal. Se trata de las tituladas San Antón de Armuru Berpiztu, Kabia, Harrespil, Alde Batera y ON/10, y ahora sus autores tienen 15 días para presentar el anteproyecto, que deberá especificar un avance económico del costo de ejecución material, ajustado a los 265.000 euros reservados para la obra.
"El jurado quiere, en primer lugar, agradecer y destacar el trabajo y calidad de las propuestas presentadas. Si bien los pliegos de condiciones dejaban a criterio de los concursantes su mantenimiento integral, intervención parcial o demolición del espacio porticado existente, la práctica totalidad de las propuestas han optado por la demolición del edificio", explican desde el Ayuntamiento, al tiempo que aseguran que "se ha valorado la capacidad de las diferentes propuestas de poner en valor la ermita y posibilitar su incorporación a la trama urbana y en particular su percepción desde la calle Landako mediante el empleo de diversas estrategias, tales como liberar espacio frente al acceso de la ermita, cubiertas translúcidas, y creación de espacios y volúmenes diáfanos" que evitan competir formalmente con el histórico templo.
Para acometer esta mejora, el presupuesto municipal reserva este año 120.000 euros, y se ha pedido al ente foral la subvención prometida para su ejecución dentro de la partida Obras básicas entidades locales Amurrio. El Ayuntamiento prevé aprobar el proyecto definitivo a principios de julio y adjudicar la obra en septiembre, con un plazo de ejecución de cinco meses, de cara a que esté materializado entre finales de 2014 y principios de 2015. De momento, los autores de las cinco ideas seleccionadas en esta primera fase del concurso recibirán una prima de 2.000 euros, pero sólo el mejor de ellos recibirá el encargo de redactar el proyecto, en dos meses desde la firma del contrato, por otros 20.000 euros. De manera paralela al certamen del que surgirá el equipo de arquitectos director de la obra, el Consistorio abrirá un proceso participativo de manera que la población pueda valorar la solución más idónea.
No en vano, esta céntrica plaza es en la actualidad un espacio semicubierto con graves deficiencias de utilización porque no cumple con los mínimos requisitos para poder albergar diferentes usos en condiciones mínimas, tales como actividades deportivoculturales, plaza del mercado semanal o zona de juegos, por lo que "queremos que la gente opine sobre diferentes alternativas y nos traslade cómo ve actualmente este espacio y su desarrollo futuro", explicó la alcaldesa, Josune Irabien.
Y es que la configuración actual de la plaza data del año 1983, cuando se procedió a peatonalizar el entorno de la histórica ermita juntera que da nombre al enclave y se sustituyó el espacio porticado existente por un pabellón cubierto en forma de U, de unos 400 metros cuadrados, adosado al templo y abierto en todos sus lados, a fin de que albergara el mercado semanal.
En consecuencia, el espacio cubierto existente se ha revelado "de escasa protección" en días de climatología adversa e "insuficiente" para dar cabida al cada vez mayor número de comerciantes que ofrece sus productos en el mercado ambulante de los viernes. Por otra parte, ya es vieja la demanda vecinal de un espacio cubierto multiusos que pueda acoger diferentes eventos y actividades al margen del mercado semanal. En particular, se requiere un espacio cubierto que pueda servir de estancia y escenario de juegos para el colectivo infantil en días lluviosos, y que pueda acoger celebraciones lúdicofestivas, tal como se recoge en el plan de revitalización comercial del municipio.