vitoria. Pudieron optar por asentar su firma de ropa en una gran ciudad, pero eligieron Vitoria, algo de lo que las dos se muestran especialmente orgullosas, sobre todo de la vida cultural de la ciudad, de su calidad de vida y de la Corre... su calle.

¿Tuvieron claro desde el principio donde querían ubicar su tienda-taller?

M.C.: Sí, en el Casco. La zona estaba clarísima. Recuerdo que el local en el que está ahora Tissue antes era El Zaguán de los Detalles, y era una tienda que me encantaba... La recuerdo perfectamente y eso que era una cría y no sabía ni a qué me quería dedicar. Cuando vimos que estaba libre ni lo dudamos. Tal vez si el local hubiese estado en la Herre, pues hubiese sido allá...

Pero estaba en la 'Corre'... ¿esta calle imprime carácter a un comercio?

M.C.: Pues no lo sabemos... lo que sí está claro es que es especial. Con mucho encanto.

¿Cómo es la 'Corre' entre semana?

P.B.: Tranquila pero con tránsito de gente. Animada. A nosotras nos vienen muy bien para la tienda. Sí que es verdad que hubo un tiempo que se abrieron muchos locales nuevos y que ahora ha sufrido un pequeño parón. De nuestra tienda para adelante hay menos movimiento...

M.C.: Luego están los bares que se han ido abriendo y que dan mucho ambiente... y que vienen genial para tomar algo cuando salimos de trabajar.

Ahora que van a llevar un trocito de Álava a la pasarela más importante del Estado... ¿qué imagen creen que se tiene fuera de Vitoria?

P.B.: La de una ciudad tranquila, bonita, con calidad de vida y con parques y zonas verdes.

M.C.: Una ciudad europea.

¿Ha ayudado a eso el año el año de Green Capital?

P.B.: Bueno... nosotras creemos que lo de Green Capital debería de ser más que un año, para que nos ayude a cambiar un poco la mentalidad, un proyecto más a largo plazo para la ciudad.

¿Y lo de la Ciudad Gastronómica?

M.C.: ¡Si es que estamos arrasando! No, en serio, esperemos que se note en visitas y en movimiento de gente. Y a los de la ciudad que nos sirva para ponernos las pilas con nuestros trabajos: lo que ahora hacemos bien hacerlo mejor para aprovechar la oportunidad.

Y hablando en 'green'. ¿Cómo ven el tema de las bicis en el Casco Viejo?

M.C.: Pues como en toda la ciudad la base debería ser el respeto. Tanto a los bicicleteros como a los peatones. A mí me da miedo ir a veces por la carretera y no siempre hay carril...

P.B.: La ciudad va dando pasos para intentar adaptarse a las bicis, y se nota, pero es un proceso lento.

¿Qué le falta y qué le sobra a Vitoria-Gasteiz?

P.B.: Faltar nada, el problema es que muchas veces la gente no sabemos ni lo que hay y se valora más lo de fuera. A nosotras nos pasa en Tissue. Parece que sólo hay tiendas que ofrecen cosas diferentes en otras ciudades... Te dicen "no sabía que había este tipo de tienda en Vitoria". ¡Y se sorprenden! Entonces les recomiendas otras tiendas de la ciudad... y terminan de sorprenderse.

M.C.: De hecho para el desfile hemos tirado todo lo que hemos podido de gente de aquí. ¿Para qué nos vamos a ir a buscar fuera cosas como la música o el cuero que nos lo hacen artistas alaveses? No tendría sentido. Hemos puesto mucho énfasis en eso: en contar con todo lo de aquí.

¿Qué cara se les queda cuando ven que un comercio echa la persiana?

M.C.: Pues mucha pena. Muchísima, da igual que sea de ropa que de otra cosa. Sobre todo cuando son tiendas que has visto toda la vida...

¿Cómo es eso de emprender? ¿Difícil o no tanto?

M.C.: Difícil no: imposible. Yo ahora lo veo y no creo que pudiera volver a hacerlo. Lo que pasa es que en el momento tienes toda la ilusión del mundo y a toda la gente de alrededor apoyándote. Pero uff... es duro.

Pues se confía mucho en vosotros para salir del agujero...

P.B.: No, si voluntad y ganas de trabajar tenemos todas. Pero faltan apoyos.

Ahora que se habla tanto de las manifestaciones de Gamonal ¿Nos movilizamos poco con la que está cayendo?

M.C.: Poco no, poquísimo. Y yo soy la primera me quejo de cosas que me parecen mal y no salgo a la calle a movilizarme, ¿eh? Pero creo que deberíamos hacerlo. Ya está bien hombre, llevamos dos años paralizados por el susto de la crisis. Vale, ya lo hemos asimilado. Ahora deberíamos decir todo lo que nos parece mal ... y claro, que nos escuchen. No puede ser que lleguen a parecer normales todos los casos de corrupción, malversación y demás.

Entonces, ¿tendríamos que salir más a la calle?

P.B.: Yo tengo una teoría, y es que hace falta darle una vuelta al tema de las movilizaciones. Hace 30 años ya se salieron nuestros padres a la calle, se consiguieron cosas, pero ahora creo que los de arriba ya pasan de lo que se haga en la calle. Sin embargo, otras cosas, como los apagones durante una hora, pueden hacer un daño económico, y de eso no pasan. Tendríamos que replantearnos este tipo de acciones, más efectivas, y somos capaces de hacerlo.

¿Son de las optimistas con el futuro económico?

P.B.: Sí claro, por supuesto. Si es que siendo negativas tampoco conseguimos nada... así que mejor encarar todo con una actitud positiva. Mira, antes me levantaba con la radio y las noticias... hace tiempo que dejé de hacerlo ¡si es que llegaba a la tienda ya de mala leche! Mejor con una sonrisa.

¿Han cambiado la radio por la tele?

M.C.: ¡Qué va! Llevo seis meses sin ella, así que ya ves. Cine y películas sí, pero televisión... ni siquiera series.

P.B.: Yo soy muy de periódico con el café. Pero de televisión tampoco.

¿Y son de música?

M.C.: Sí claro. ¡Muchísimo! En el taller trabajamos siempre con música. Yo, Band of Horses o Phoenix.

P.B.: Yo, Bon Iver, pero hay veces que me concentro en lo que estoy haciendo y no sé ni lo que suena.