el recién concluido año 2013 ha traído de la mano una importante caída de la natalidad en Gasteiz, acorde con los difíciles tiempos que corren. La crisis económica, que sigue golpeando con fuerza al bolsillo de las familias, el regreso en masa a sus países de origen de una población inmigrante que tradicionalmente ha dado un impulso muy notable a la natalidad local, así como un menor número de mujeres en edad fértil, constituyen los tres motivos principales que explican esta realidad. Según los datos aportados a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA por los dos hospitales gasteiztarras con servicio de maternidad, Txagorritxu y el privado Vithas San José, un total de 2.691 niños vinieron al mundo en la capital alavesa a lo largo del año pasado, por los 2.890 del ejercicio 2012. Casi un 7% menos. 1.399 fueron chicos y 1.292, chicas. Como curiosidad, por segundo año consecutivo ellos predominaron sobre ellas. El mes más activo fue julio, con 236 nacimientos.
Si bien es cierto que la natalidad en Gasteiz y Álava nunca ha sido especialmente alta, lo que más llama la atención en esta última remesa de datos es el descenso de los nacimientos en número relativos. Una tendencia claramente a la baja y que también ha tenido su reflejo en las estadísticas estatales, mediatizadas por unas cifras económicas alarmantes. Hay menos mujeres en edad de ser madres y también menos mujeres que se deciden a serlo por ese miedo a no poder mantener a su descendencia con un mínimo de dignidad.
Iñaki Lete, ginecólogo del Hospital Universitario de Álava (HUA), apunta también a estos dos factores fundamentales para explicar esta crisis de natalidad paralela a la económica. "No es de extrañar que los nacimientos bajen porque aquí no hay trabajo y gran parte de la natalidad se producía en grupos de inmigrantes que han regresado a sus países. Eso se une a que siguen descendiendo las mujeres en edad fértil", justifica el especialista, responsable del área de Ginecología en Santiago. Esto se debe a que el número de mujeres de entre 15 y 49 años se ha reducido con el tiempo considerablemente porque forman parte de generaciones menos numerosas nacidas durante la crisis de natalidad de los ochenta y la primera mitad de los noventa, además del ya mencionado regreso de inmigrantes a sus lugares de origen.
Tasa de reemplazo El envejecimiento de la población hace que desde hace ya "mucho tiempo" la denominada tasa de reemplazo, necesaria para mantener los niveles de población de una comunidad, no se cumpla en Álava. "Debería ser de 2,1 hijos por mujer, pero quedamos muy lejos. Además, la natalidad aquí es especialmente baja", apunta Lete. A pesar de que el Instituto Nacional de Estadística (INE) haya pronosticado en alguna ocasión que la población crecerá de forma sostenida a lo largo de los próximos años, Lete recuerda que "son estudios hechos antes de la crisis". Este año pasado, quizá el peor para Álava desde que la situación económica comenzó a torcerse, ha sido sin embargo positivo para el territorio en términos demográficos.
De vuelta a la crisis de natalidad, de los 2.628 partos atendidos el año pasado en Txagorritxu -204 menos que en 2012- 65 fueron gemelares y sólo uno de trillizos, tres niños que nacieron de la misma madre el pasado mes de noviembre. En 2012 se dieron tres partos múltiples en la ciudad, por lo que incluso aquí se ha dado un descenso.
La edad media de las madres gasteiztarras se situó el año pasado en los 32,81 años, algo por encima que hace justo un año, cuando era de 32,66. La madre más joven sólo sumaba 15 años al tener a su descendiente -en marzo del año pasado- y la mayor, 55. En 2012, Txagorritxu fue testigo de dos nacimientos incluso más llamativos por la edad de las madres. La mayor sumaba 64 años y la más joven, 14. Nada menos que medio siglo de diferencia entre una y otra.
El sobresaliente trabajo de los responsables de las áreas de maternidad de Gasteiz ha hecho, además, que el número de niños fallecidos en el anteparto, el intraparto o el postparto haya sido de nuevo muy reducido, con sólo 15 -siete niños y ocho niñas- en Txagorritxu a lo largo de 2013 en los ya citados 2.628 partos atendidos. Una tasa de mortalidad de poco más del 0,5%. En lo que se refiere a las características de los partos asistidos en el HUA-Txagorritxu, 1.884 madres fueron anestesiadas con epidural, el 70,2% del total, mientras que 340 nacimientos fueron por cesárea, poco más de un 12%.
El pasado 2013 ha sido también, sin duda, el año de la recuperación de la maternidad privada en Álava, que desde hacía ya unos cuantos años sólo contaba con la unidad de Txagorritxu -tras los cierres de las de La Esperanza y Santiago-. El Hospital Vithas San José, la antigua Policlínica, inauguró su flamante servicio de maternidad el pasado 2 de diciembre y ya ha tenido la oportunidad de añadir un buen puñado de nacimientos a las estadísticas. Fueron 11 en total durante el último mes del año pasado, siete de ellos de niñas y cuatro de niños, a diferencia de lo que sucedió en Txagorritxu.
Que los niños fuesen predominantes no pasa de ser una mera anécdota a juicio de Lete. "Por lo general estamos en 50% y 50%", apunta el especialista. A día de hoy, no obstante, la población de Gasteiz está integrada por más mujeres que por hombres, aunque esto se explica por una realidad distinta, que no es otra que tienen una esperanza de vida bastante más amplia que la de los hombres.
