Zambrana. El Ayuntamiento de Zambrana remodeló hace ahora un año una antigua sala pública del pueblo para transformarla en un hogar del jubilado, con la ayuda de una subvención de la Diputación alavesa que costeó 18.760 euros de los 25.020 que tuvo que desembolsar el Consistorio por la obra. Alegaba el gobierno municipal en su solicitud que el 45% de sus habitantes son mayores de 65 años. Sin embargo, doce días después de que la factura por los trabajos quedara registrada en el Ayuntamiento, la Corporación aprobó el régimen interno de una sociedad pública cuya sede se instaló en el mismo local y cuyos fines son realizar "actividades culturales, recreativas, deportivas y potenciadoras de las relaciones sociales", así como "desarrollar actividades económicas y poseer bienes de toda clase". Es Zabalate Elkartea, una "sociedad gastronómica municipal" abierta a todos los habitantes del pueblo.

De hecho, pueden hacerse socios quienes paguen el IBI en Zambrana (100 euros de cuota de entrada y 8 euros mensuales) y quienes estén empadronados en la localidad (75 euros de cuota de entrada y 5 mensuales). Los mayores de 65 años, por su parte, sólo deben abonar 50 euros de cuota de entrada y 3 euros mensuales. Los miembros de la Corporación de la Agrupación Independiente de Zambrana y del PP, junto con otros vecinos de la localidad, son los miembros de su junta directiva.

Consultado por esta operación, el alcalde de la localidad, Aitor Abecia, explicó ayer que el "escaso potencial" del club de jubilados les llevó a crear una sociedad privada, pero abierta a todos los vecinos, a la cual se le cedió el uso del local de la calle Real mediante un convenio aprobado en el Pleno municipal y que estipula que si hay demanda suficiente de jubilados el local volvería a ser usado por el Ayuntamiento para acoger a los mayores. Según Abecia, Zabalate cuenta con 62 socios en un pueblo de apenas 300 habitantes. "Es rara la casa donde no hay un socio", afirmó el primer edil, quien afirmó que remitió el expediente de esta obra a todos los grupos de las Juntas Generales a petición del PNV.