vitoria. Un gigantesco mapa botánico del municipio se extiende ante los ojos de los vecinos de la Avenida, ahora ya sí con su forma definitiva. Ayer se dieron por finalizadas las obras de la fachada vegetal del Palacio Europa, la actuación más identificable de la reforma del edificio, que tras meses de obras y cierta incertidumbre -en agosto era más amarillo que verde- lucía ayer con todo su esplendor, bien regada por la abundante lluvia de la noche anterior. Endrinos, bojes, zarzamoras, romeros; plantas del humedal de Salburua, de los bosques-isla de la Llanada, de los Montes de Vitoria... La fachada trata de hacer las veces de enciclopedia vegetal de una ciudad en la que se fija la Comisión Europea a la hora de diseñar el urbanismo sostenible del futuro, gracias en buena medida a su Anillo Verde.
El coordinador de Medio Ambiente, Luis Andrés Orive, recordaba, en ese sentido, que la fachada inaugurada ayer supone un "homenaje" a esos parques periurbanos que han reubicado a la capital alavesa en el mapa y que cuesta veinte veces menos gestionar que cualquier zona verde. Ahí, en la reducción del gasto económico y energético, radica el verdadero objetivo que tiene la obra de reacondicionamiento de un edificio "tremendamente ineficiente", señaló Orive.
Así, la fachada vegetal limita la entrada de calor en el edificio y reduce el consumo en aire acondicionado, pero es que, además, se va a recomponer todo el aislamiento de las cubiertas, siguiendo ese mismo objetivo, unos trabajos que han dado comienzo el pasado mes de octubre. En esa fase se encuentran ahora las empresas adjudicatarias de los trabajos, en la de remozar también el interior del edificio. Así, tras la habilitación de la sala Green de 2011, ahora se trabaja en las salas Olarizu y Estibaliz, que ocupan las antiguas instalaciones deportivas del Europa y que, aunque están a diferentes alturas, contarán con una rampa que permitirá unificarlas en un único espacio para 2.206 personas.
cafetería y restaurante Ya el año que viene comenzarán las obras en el espacio que separa los dos bloques del edificio, ahora al aire libre. Allí se habilitará un nuevo auditorio para 800 personas, y, aprovechando sus formas redondeadas, se construirá un enorme cilindro como entrada principal al edificio donde se ubicarán una cafetería y un restaurante.
Por otro lado, y dado que la reforma de la Avenida de Gasteiz convertirá la zona de la fachada en un espacio eminentemente peatonal, las entradas al aparcamiento del Palacio Europa se trasladarán a la parte trasera del edificio, a la calle Bolivia.
El alcalde vitoriano, Javier Maroto, asistió ayer a la presentación de esta fachada vegetal recién inaugurada. No en vano, la reforma del Europa es una de sus apuestas de legislatura, tras paralizar la construcción del BAI Center de la plaza Euskaltzaindia. Maroto defendió que los ocho millones de euros en que se han tasado las obras supone un importante ahorro frente al centenar largo de millones que iba a costar el auditorio nuevo. Cuando acaben los trabajos, el Palacio Europa podrá acoger hasta 5.700 personas en un solo espacio unificado.