vitoria. Un bloque de 48 viviendas de la calle Laguardia será el próximo edificio a rehabilitar con las ayudas que el Ayuntamiento concede a los denominados barrios de oro -Adurza, Abetxuko, Zaramaga, Ariznabarra y Coronación-, además del Casco Viejo, para la modernización de sus pisos, en la mayoría de los casos en mal estado debido a su antigüedad. En total, 2.995 casas, que se arreglarán con los fondos de 2012, ya abonados, y de 2013, que se pagarán de manera directa.

El importe total de las ayudas asciende a 2.161.000 euros, según contabilizó ayer el concejal de Urbanismo, Miguel Garnica, preguntado por el PNV. A esta cifra hay que añadir 310.000 euros correspondientes a la rehabilitación integral del bloque de Zaramaga, cuyo proyecto definitivo está a falta de presentarse para que comiencen las obras. Garnica explicó que había una formalidad pendiente de realizar en los presupuestos, que ha sido ya resuelta. En concreto, se requería la transferencia de crédito de una partida que debía pasar del capítulo 6 de inversiones para la creación de una nueva partida en el capítulo 4, que es el de gasto corriente. Esta modificación se solicitó a Hacienda a principios de octubre, y ya se ha llevado a cabo la transferencia, lo que ha permitido proceder al abono de las cantidades aprobadas para cada expediente de obra.

Las explicaciones del edil no ayudaron, sin embargo, a despejar las dudas de los nacionalistas. Gorka Urtaran sigue denunciando los retrasos y sospecha que el gobierno del PP sólo se ha puesto las pilas y ha avanzado en el pago cuando se ha visto forzado por su grupo. El portavoz jeltzale lamenta que para que los proyectos salgan adelante sin problemas sea necesario que algún grupo de la oposición interpele al equipo de Maroto en las comisiones.

Y es que el PNV ya denunció el lunes que del millón de euros presupuestado aún no se había gastado nada, lo que significa que hay en el Ayuntamiento 600.000 euros pendientes de conceder a vecinos que ya han solicitado las ayudas para el arreglo de sus casas. Si a esto se une que en el nuevo borrador presupuestario presentado por Maroto aparece esta misma cantidad reservada para 2014, los nacionalistas sospecharon que este año iba a pasar en blanco, dejando el dinero para 2014, de ahí su presión. Hay que tener en cuenta que el proyecto de rehabilitación de viejas casas en los cinco barrios citados es fruto de un acuerdo entre jeltzales y populares. Las comunidades de vecinos de estos pisos utilizan las subvenciones para la reforma de fachadas, mejoras en la accesibilidad, como la instalación de ascensores donde no los hay, medidas de ahorro energético y obras similares.