vitoria. En medio de uno de sus momentos más convulsos de su todavía corta existencia como centro logístico, Arasur pierde al que durante los diez últimos años ha sido su gerente. Según confirmaron ayer a este periódico fuentes forales, Fernando Hernández, que asumió la silla de dirección del parque ubicado en Rivabellosa desde su pistoletazo de salida en 2003, se jubilará en los próximos días dejando paso a un nuevo rostro al frente de la entidad que gestiona Arasur, Araba Logística.

El recinto del sur de Álava, que estos días afronta un punto de inflexión crucial para su futuro, continúa sin embargo a la espera de que la Diputación alavesa afronte el paso necesario para dar luz verde a la entrada del puerto de Bilbao en el centro logístico. Un movimiento que insuflaría por fin aire en los maltrechos pulmones de Arasur con la construcción de un puerto seco que, según el acuerdo inicial, iba a a ser costeado a partes iguales por el Gobierno Vasco, el puerto de Bilbao y el propio Ejecutivo foral alavés.

Sin embargo, ahora el Gabinete dirigido por Javier de Andrés considera inadecuado afrontar dicho desembolso a escote y pide que su aportación total sea menor a la de sus compañeros de viaje. Un contratiempo inesperado que ahora mantiene peligrosamente congelada la apuesta por relanzar Arasur como nuevo eje de la logística alavesa -junto al CTV y la propia terminal de Foronda- aunque tanto Gobierno Vasco como Puerto de Bilbao trabajan ya en la creación del proyecto para la creación de la necesaria playa de vías.

El ente público ETS (Euskal Trenbide Sarea) elabora junto a los técnicos de la autoridad portuaria un proyecto que en principio estará terminado en los próximos cuatro meses. Una vez finiquitado, las obras arrancarían en la segunda mitad de 2014 y quedarían finalizadas en un periodo que rondaría el año y medio. Así las cosas, al tiempo que Lakua y el Puerto de Bilbao empiezan ya a desesperarse por la apatía de la Diputación Foral de Álava en un asunto que hasta hace bien poco el propio Javier de Andrés consideraba prioritario, Arasur continúa inmerso en un viaje a ninguna parte por culpa de una planificación errónea y una deuda que se ha ido acumulando a lo largo de los años hasta formar una inmensa bola de nieve que a día de hoy asciende a 55 millones de euros, renegociada por cierto el pasado mes de abril con Kutxabank, Caixabank y el Banco Santander.

Cuando parecía que el centro logístico de Rivabellosa se adentraba en una bruma de la que no iba a ser capaz de salir solo, la decisión del Puerto de Bilbao de implantar un puerto seco en 65.000 metros cuadrados del parque alavés viró el rumbo de Arasur 180 grados, aunque ahora el ente foral se aferra impertérrito al timón y sólo quiere soltarlo bajo sus propias condiciones. Una postura que ayer la consejera de Política territorial de Lakua, Ana Oregi, consideraba "difícil de entender"

Y ahí, en medio de la tormenta, la nave pierde ahora al que durante los diez últimos años fue su capitán, Fernando Hernández. Lo hace, además, mientras Saba parques logísticos, principal accionista de Arasur, da la callada por respuesta y ni tan siquiera quiso ayer confirmar a este periódico la marcha de Hernández. De cualquier forma, a partir de ahora será otro gerente el que se encargue de afrontar los numerosos retos de futuro del centro logístico del sur de Álava.