Gasteiz. En el 75 aniversario de las Brigadas Internacionales, nueve ciclistas británicos llegarán hoy a Legutio. Pertenecen al club Clarion 1895, que realiza una marcha por la península en homenaje a los 59.000 brigadistas que lucharon en defensa de la II República. El Ayuntamiento de la citada localidad recibirá (13.00 horas) a una representación de la agrupación, de la Ciclista Gernikesa, de Gernika Gogoratuz y de la Asociación Republicana de Bilbao. En total, una comitiva formada por 17 personas, que tendrán ocasión de visitar los escenarios de la Batalla de Villarreal, guiados por un miembro de Sancho de Beurko, la sociedad para el estudio de la Guerra Civil.

La marcha de los ciclistas británicos a su paso por Euskadi partió ayer de Santurtzi para llegar hoy al territorio histórico haciendo escala en Legutio. Si la providencia no lo impide, los aventureros llegarán al final de su ruta el próximo 26 de octubre en Barcelona.

Esta iniciativa es un homenaje a los cuatro miembros del Club Clarion que fallecieron en España y al resto de socios que pudieron regresar a casa después de la contienda. La carrera también quiere recordar a los 59.000 brigadistas internacionales -voluntarios extranjeros de 54 países- que participaron en la Guerra Civil española junto a la II República contra las tropas franquistas. En el viaje, que no cuenta con ningún sponsor y que paga cada miembro del Clarion de su bolsillo, les acompaña Manuel Moreno, presidente de la asociación Niños del 37. Éste es hijo de una de las niñas vascas que tuvo que salir en barco hacia Inglaterra y de un refugiado vasco que pasó por Argel y Oran antes de recalar en Inglaterra. Su presencia pretende honrar a los 4.000 niños y sus familias que fueron acogidos en Gran Bretaña.

El origen del citado club ciclista hay que buscarlo hace más de un siglo. De hecho, a finales de 1880 se produjeron en Gran Bretaña dos fenómenos paralelos que sincronizaron perfectamente: el auge de la bicicleta y de los principios de las ideas socialistas, que proliferaron en los núcleos urbanos afectados por la revolución industrial. El vehículo a pedales ofreció al obrero un escape de las duras condiciones en las fábricas. Se convirtió en el único lujo que podían permitirse aquellos asalariados de finales del siglo XIX, ya que les ofrecía la posibilidad de abandonar la ciudad después del trabajo y les otorgaba el poder de desplazarse por carretera sin importar la clase a la que se perteneciera. Es ahí donde nació el club Clarion. En febrero de 1894 tuvo lugar un primer encuentro de aficionados ciclistas y unos meses más tarde siete de ellos decidieron realizar un viaje en bici por Gran Bretaña. Un año más tarde, ya eran 120 los que se reunieron para crear el Club Clarion. El objetivo era constituir una asociación que agrupara a las diversas secciones del club repartidas por todo el país con el fin de propagar las ideas socialistas además de promover carreras y excursiones. Hoy en día, el actual National Clarion Cycling Club 1895, rama del antiguo club National Clarion Cycling Club, sigue apoyando los principios originales del club.