Vitoria. Llegó el PP a la Alcaldía de Vitoria dispuesto a sacar a los agentes municipales "de los despachos a las calles". Y en ésas está. Ayer, en la presentación del presupuesto destinado al departamento de Seguridad Ciudadana, el equipo de gobierno anunció su decisión de incorporar el próximo mes de julio a la Policía de Barrio 20 de los 29 efectivos de la última promoción que ahora están realizando las prácticas. Así que la unidad pasará de los actuales 64 patrulleros a 84, con un refuerzo especial para Salburua y Zabalgana. Aunque desde las filas populares se llevaba tiempo aplaudiendo la mejora de la seguridad en los nuevos barrios, la realidad indicaba la necesidad de reforzar mucho más la cobertura.
De esos 84 policías de proximidad que tendrá desde el verano Gasteiz, 24 estarán destinados a Salburua y Zabalgana: se repartirán en grupos de tres, por cada uno de los cuatro turnos de mañana y tarde, en cada uno de estos dos distritos. Los demás, 60 en total, se dedicarán al resto de la ciudad, aunque no se especificó de qué manera quedarán distribuidos por los distintos barrios. Y todos ellos patrullarán "preferiblemente a pie", explicó la concejal de Seguridad Ciudadana, Marian Castellanos, a no ser que la zona a la que tengan que desplazarse esté muy alejada y no deban perder tiempo. En esos casos, se motorizarán. Así que, precisamente para cubrir estas excepciones, el departamento adquirirá por 50.000 euros ocho motocicletas tipo scooter.
El socio presupuestario del gabinete Maroto respaldó la necesidad de apostar por un modelo de Policía "de cercanía y proximidad", más allá de destacar la dotación presupuestaria del departamento. Eso sí, el PNV se mostrará vigilante para "que se siga trabajando en la inconclusa ponencia de la Policía y en las comisiones de Función Pública para que la plantilla esté en las mejores condiciones", subrayó la edil nacionalista Blanca Guinea. Sus declaraciones hicieron recordar los últimos conflictos suscitados dentro del Cuerpo, a raíz de destaparse un informe del jefe de Seguridad Ciudadana que hablaba de posibles cambios organizativos que podrían llegar a suponer la desaparición de las condiciones de trabajo pactadas para los agentes entre los ejercicios de 2009 y 2014.
Pero ayer no era el día para abrir la espita del desasosiego en la plantilla. Castellanos se limitó a anunciar el refuerzo de la Policía de Barrio, para a continuación desgranar otras cuestiones prioritarias de su presupuesto. Por ejemplo, los 203.000 euros destinados a incrementar la seguridad vial en distintas zonas de la ciudad, con la colocación de focos en los pasos de cebra más peligrosos, iluminación de calzadas, más semáforos, instalación de radares, campañas de educación vial para ciclistas y peatones, y más controles de alcoholemia y consumo de estupefacientes (con más etilómetros). También se va a adquirir un nuevo vehículo para Bomberos y nuevas emisoras.
Una iniciativa que llevaba tiempo anunciándose y que por fin se materializará será la utilización de parte del parking Iradier Arena como depósito municipal para los coches que se lleve la grúa. El departamento de Seguridad Ciudadana contempla 15.000 euros para separar físicamente 50 plazas destinadas a este fin. "Y el beneficio será para el ciudadano, ya que su coche descansará bajo cubierto", ensalzó Castellanos. La pena de la multa nadie se la quitará.