La construcción del depósito de tormentas de Yurre se suma al listado de obras que en Vitoria han resultado un fiasco. Construido para regular el agua del cauce del Zadorra, costó ocho millones de euros y lleva un año inaugurado y sin funcionar. Y lo peor es que no lo hará hasta 2020, plazo para el que se prevé que acaben las intervenciones previstas en los ríos del sur de la capital, actuaciones que se acometerán para prevenir inundaciones. Además, el Ayuntamiento tendrá que gastar más dinero, según confirmó ayer el edil de Urbanismo, Miguel Garnica, al grupo socialista.