vitoria. Si el Gobierno Vasco "ha castigado" a Vitoria por modificar la ayuda prometida para el futuro servicio de bicicletas públicas, ¿cómo se concibe que la Diputación alavesa se niegue ahora a costear su parte del tranvía de Abetxuko? El Ejecutivo autonómico lanzó la bomba ayer, casualmente después de las críticas lanzadas por el alcalde gasteiztarra a propósito de la polémica de las bicis. A través de un comunicado, el gabinete de López aseguró que ha recibido una carta del Ejecutivo foral en la que anuncia "la ruptura del acuerdo" entre las tres instituciones, lo que obligaría al Consistorio vitoriano a hacerse cargo de la cuantía de la Diputación; esto es, 1,1 millones de euros. Mucho dinero en plena crisis del que el Consistorio carece.

El de ayer fue otro claro episodio de la guerra PSE-PP, con el aliciente de forzar a Maroto a posicionarse ante la falta de apoyo foral al tranvía de Abetxuko por parte de sus colegas populares con la misma beligerancia que ante la disminución de la ayuda de este año para el sistema de bicis. La Diputación, no obstante, fue muy clara al respecto y recordó que desde septiembre es pública su posición. "Ya dijimos que no había convenio, así que no hemos roto nada, y que el PNV no había presupuestado partida, por lo que no íbamos a asumirla en época de recortes", explicaron desde el ente foral. Eso sí, poco después, puntualizaron que "estamos abiertos a todo tipo de negociación".

Tal vez la llamada que el gabinete Maroto hizo a la Diputación entre medias explica el matiz.