Vitoria. Las líneas de autobuses urbanos se acercan, por fin, a Arkaiate y Larrein. Se prevé que, a finales de julio, se amplíen las líneas 5 -Salburua-Sansomendi- y 6 -Zabalgana-Salburua- en 943 y 1.925 metros, respectivamente. Con esta extensión de las dos líneas, que ayer presentó el grupo municipal del PNV, se crearían cinco paradas de autobús en los nuevos barrios para asegurar que las cerca de 2.000 personas residentes en la zona tengan el servicio municipal de Tuvisa a menos de 350 metros de sus casas.
En la línea 5, el recorrido se extenderá desde bulevar de Salburua con plaza de la Unión hacia la avenida de Bruselas, que contará con dos paradas, una en el número 8 y otra en esta misma calle pero junto a la Carta de Atenas. Estos cambios, que benefician a la zona noroeste de Salburua, pasarían por la finalización de las obras en la Panificadora Gorbea y, por ello, se ha pensado en una alternativa para que el recorrido pueda hacerse realidad sin depender de esta cuestión.
En la línea 6, mientras, para llegar al corredor clave de Arkaiate y acercarse -sin cruzar las vías del tren- a Larrein, se extenderá el trazado que ahora muere en Bulevar de Salburua por Ilíada. El recorrido contará con tres paradas, todas ellas en Ilíada: dos -una de ida, otra de vuelta- junto a Nadine Gordimer y una tercera, la más alejada, en torno a Gabriel Martínez Aragón.
En todo momento se habló de una extensión de línea, algo que generó suspicacias entre los vecinos de la zona, ya que en su día desde el equipo de gobierno se habló de la posibilidad de crear una lanzadera, al estilo de la que en la actualidad marcha hacia Aldaia. Fuentes del equipo de gobierno aclararon que, en principio, se habla de ampliar la línea, pero que la solución final deberá adoptarse en el Consejo de Tuvisa. El PNV, insistió en que no se trata de un parche y, por tanto, no habrá lanzadera.
Y también se anunció la nueva previsión de la puesta en marcha: finales de julio. Hasta ahora, la última meta era que en junio hubiera por fin avances en el asfaltado de Arkaiate, clave según se dijo para que los autobuses no se vieran afectados por las arquetas y pudieran llegar al barrio, pero finalmente será a últimos de julio. La nueva fecha se debe a que la actuación depende de la puesta en marcha de la ampliación del tranvía en Abetxuko, unas obras que impulsó el Gobierno Vasco. Cuando el metro ligero llegue al centro del barrio, el Ayuntamiento suprimirá la actual lanzadera de Tuvisa que acerca a los vecinos a la parada existente del tranvía, que en su día se quedó a las puertas del pueblo, y ese personal y esos autobuses se integrarían en el resto de servicios de los urbanos. El portavoz jeltzale en el Ayuntamiento de Vitoria, Gorka Urtaran, también explicó que el asfaltado no sería un problema para la ampliación de la línea. En principio, porque se espera que avance con más rapidez y esté listo para esas fechas.
Avance en movilidad sostenible Con todo, esta nueva extensión de las líneas de Tuvisa pretende dejar en un porcentaje residual el número de hogares donde, en la actualidad, no se cumplen las máximas del Plan de Movilidad Sostenible, que apuesta por que las paradas no estén a más de 350 metros de distancia de los residentes. En la actualidad, la medida se cumple en el 95% de los casos en la ciudad. Al llegar a Arkaiate y Larrein, ya sólo quedarían algunos puntos de Borinbizkarra y otros en el entorno de la estación de tren, en pleno centro.
El PNV dio ayer a conocer estos detalles en conferencia de prensa como parte de los 50,3 millones de euros pactados para equipamientos y servicios entre el PNV y el gabinete Maroto para toda la legislatura. Un pacto que pretende responder a las necesidades de Salburua y Zabalgana, los barrios de oro -más antiguos- y la zona rural. Hace una semana ya se dio a conocer la puesta en marcha de la escuela infantil de Mariturri y, ahora, el nuevo paso en las líneas de autobús.