Vitoria. En Vitoria, cuando se reforma una calle se cambian hasta las tripas. Sin embargo, la primera fase de transformación green de la Avenida de Gasteiz sólo va a serlo cara vista. Los grupos políticos de la oposición han decidido materializar su rechazo al proyecto estrella del gabinete Maroto de la única forma posible: votando hoy en el Consejo de Amvisa en contra de las obras de saneamiento y abastecimiento previstas en la acera por donde arrancará la intervención, la contraria a la del Palacio Europa. Eso significa que las tuberías que discurren bajo el nuevo pavimento de la calle seguirán siendo las viejas conducciones de fibrocemento, propensas a reventar con las subidas y bajadas de presión o los cambios de temperatura.
La primera fase quedará reducida, así pues, a una mera operación de cirugía estética con el riesgo de tener que levantar la calle en unos años cuando las tuberías no den más de sí. Y no es que la oposición desee fastidiar a los vecinos, pero tiene claro que no le queda otra alternativa que poner trabas, por pequeñas que sean, al equipo de gobierno para que se replantee la puesta en marcha de su Anillo Verde Interior. PNV, PSE y Bildu no comprenden que el gabinete Maroto se embarque en una obra millonaria, por mucho que el Gobierno Vasco ponga el dinero para el primer tramo, mientras aplica recortes deportivos, culturales y sociales.
Es de suponer que el PP seguirá adelante con la reforma de esta acera aunque se haya quedado sin la posibilidad de renovar a la vez la infraestructura de abastecimiento y saneamiento de las aguas -una obra presupuestada en 332.483 euros-. Ahora bien, la pregunta que está en el aire es qué pasará cuando llegue al Consejo de Amvisa la acera del Palacio Europa. Por ahí es por donde el gabinete Maroto tiene previsto que aflore el río. Y si esa obra, además de la tuberías, depende de esta sociedad municipal, todos los grupos municipales podrán votar. Así que la oposición podría dar al traste con uno de los iconos del Anillo Verde Interior a su paso por la Avenida.
Seis roturas A la espera de nuevos capítulos, el balance de roturas de tuberías en lo que vamos de año pone en evidencia la necesidad de seguir renovando la red de fibrocemento. En cuatro meses, se han registrado seis reventones, todos ellos en calles donde todavía no se han cambiado las tuberías.
En enero se produjo un reventón, así como en febrero, en marzo hubo dos y en lo que llevamos del mes de abril ya ha habido dos. El último fue ayer en la calle Andalucía, entre los números 28 y 62.