vitoria. Se acabó casarse en el Consistorio sin abrir la cartera. A partir del año que viene, las parejas que quieran darse el sí quiero en las dependencias municipales deberán pagar 150 euros. El PP y Bildu sumaron sus votos para la creación de esta nueva ordenanza fiscal, que permitirá sufragar algo más de la mitad del coste de cada enlace. Una decisión con la que Vitoria se suma a la larga lista de ayuntamientos españoles que, acuciados por la delicada situación económica, han convenido convertir las alianzas amorosas en una fuente añadida de recaudación.
En la actualidad, el gasto por boda en el Ayuntamiento gasteiztarra es de 274,49 euros. Del montante total, 122,68 euros corresponden a los gastos que conlleva tener trabajando a un conserje, el policía municipal y una persona de protocolo; 15,19 euros, a la elaboración del acta matrimonial y el resto de documentos oportunos; 10,24, al coste derivado de la ocupación de la sala con su mobiliario, la luz, la calefacción y los adornos; 26,38 a la labor de limpieza; y los restantes 100 euros, a los txistularis. Por tanto, con la tasa aprobada ayer el Consistorio podrá costearse algo más de la mitad de lo que se deja por enlace. Más o menos como la mayoría de los consistorios del Estado que ya han creado su propia ordenanza.
El PNV votó en contra por considerar que "el estudio de costes no es real" y apostó por crear dos paquetes: uno con txistularis y otro sin ellos. El PSE también rechazó la tarifa porque "la decisión no ha pasado por la ponencia de fiscalidad", el foro destinado a ajustar los precios de los servicios a sus costes reales.