vitoria. Si todos los vitorianos pensaran como Bildu, la nueva figura del abonado a las instalaciones municipales deportivas municipales planteada por el equipo de gobierno no conseguiría el que dice que es su propósito: fidelizar clientes. La formación abertzale alertó ayer de que el planteamiento del PP no busca captar más socios sino recaudar más dinero, ya que con la novedad de incorporar descuentos en las actividades socioculturales de los centros cívicos "sube la cuota de los niños de 5 a 15 años de los 6,6 euros al año a 26". Un reajuste "inaceptable" para este grupo al que se sumaría el incremento en 4,3 euros del tramo de 18 a 34 años. "Se cargan la estrategia del Ayuntamiento de incentivar el ejercicio físico entre los más jóvenes para embolsarse 300.000 euros más al año", criticó la edil Itziar Amestoy.
Curiosamente, este reajuste de cuotas no ha sido incluido en el proyecto de ordenanzas fiscales del gabinete de Javier Maroto pese a ser una tasa. Y, más aún, recientemente en Junta de Gobierno el PP había acordado su congelación. El edil de Bildu Antxon Belakortu consideró esta situación como un "fenómeno paranormal" y se preguntó si es que el concejal de Servicios para la Ciudadanía, Alfredo Iturricha, no ha logrado el apoyo de su partido pero está tan interesado en sacar adelante la nueva figura del abonado que ahora "va a intentar colárnosla" con su presentación el próximo lunes en comisión municipal.
El PNV reconoció que fue su grupo quien pidió a Iturricha que explicara su propuesta en comisión, pero aun así mostró su extrañeza por que no se haya incorporado la subida de la tasa en el proyecto de ordenanzas fiscales del gobierno. El mismo sentimiento mostró el PSE, que también prefiere esperar a conocer los detalles de la nueva figura del abonado de boca de Iturricha antes de entrar en valoraciones.
El aludido, por cierto, no dudó en reaccionar a las críticas de Bildu. Negó que la subida haya sido encubierta al no incluirse en el proyecto de ordenanzas fiscales, aunque a la vez admitió que desde el principio la intención del PP ha sido presentarla a modo de alegación tras la aprobación inicial de las ordenanzas. Respecto a la fórmula en sí, defendió que permitirá reducir los gastos de gestión, reajustar cuotas que estaban desequilibradas y fidelizar gracias a los descuentos en otras actividades.