vitoria. El PNV afirma que el alcalde, el popular Javier Maroto, "tiene poca credibilidad"; el PSE critica al primer edil por pedir apoyos cuando, durante cuatro años de Gobierno Lazcoz, no votó a favor de ningún presupuesto u ordenanza; y Bildu le acusa de alinearse a la derecha al hablar de las ayudas sociales. Cada grupo municipal dio una lectura particular del discurso de Maroto, pero los tres coincidieron de nuevo al acusar a Maroto de activar medidas de cara a la galería; su invitación a los ciudadanos a reunirse con él fue la más censurada.
La oposición ya señaló, cuando el nuevo equipo de gobierno superó sus primeros 100 días de gestión, que Maroto actuaba simplemente por "marketing". Así describieron los partidos su apuesta de mayor control por las ayudas sociales, la paralización del BAI Center o la retirada de ciertas entradas a la Corporación. Varios de estos temas volvieron a estar presentes ayer en la valoración inicial de los grupos tras la intervención del alcalde durante el debate sobre el estado de la ciudad, pero el tema estrella fue la ya bautizada como Cita con el alcalde. Bildu fue el menos crítico, ya que valoró la apuesta por fomentar la participación ciudadana, pero también evidenció el carácter "populista" de la medida. PSE y PNV, mientras, lamentaron que ésta fuera la única propuesta concreta que Maroto anunció en su discurso.
El portavoz del PNV en el Ayuntamiento, Gorka Urtaran, apuntó que "este Gobierno sigue sin materializar sus medidas" y, además, lamentó que no tenga en cuenta las dos prioridades de la capital alavesa: el empleo y el mantenimiento de la calidad de vida. El edil advirtió al PP de que si sigue vinculando la lucha contra el fraude a los recortes, no contará con su apoyo. Y que ese consenso debe buscarse por convencimiento y no por necesidad.
El PSE también recordó al PP el papel que desarrolló durante los últimos cuatro años en la oposición, cuando se le acusó de decir no a todo por sistema. El concejal socialista Juan Carlos Alonso cargó también contra "el silencio preocupante" del alcalde en cuestiones como el comercio, la educación, los mayores, la igualdad, la juventud o el Casco Antiguo, así como contra sus "dudas" en el soterramiento, el Anillo Verde Interior o la generación de empleo, Y, finalmente, criticó al PP en un tema en el sí se ha mostrado firme: el mayor control de las ayudas sociales. "El alcalde se muestra fuerte con los débiles y débil con los fuertes", remarcó.
El tema social -además del político- también estuvo muy presente en el balance de Bildu. Su portavoz, Kike Fernández de Pinedo, lamentó la insistencia del alcalde al vincular fraude y ayudas sociales. Además, el concejal recordó que deben darse pasos para garantizar el estado de bienestar y, por ello, insistió en que, en materia impositiva, "hay gente que tiene de sobra", en clara referencia al Impuesto del Patrimonio. Hoy habrá una nueva oportunidad para que los grupos retomen estos temas pendientes. Y para que busquen respuestas.
