Vitoria. El Teatro Principal volverá hoy a bajar el telón. La huelga de funcionarios de Vitoria, al igual que ocurrió el martes con el concierto de la Orquesta de Cámara de Munich, ha impedido el montaje de la danza Didas y Eneas, por lo que el Ayuntamiento confirmó que a partir del próximo martes empezará a devolver también el dinero de estas entradas. Los trabajadores, por su parte, se movilizaron ayer por segundo día consecutivo ante la céntrica instalación municipal para vigilar que el Ayuntamiento no buscara tangentes por las que salir para celebrar el espectáculo.

Tras una noche de encierro en las oficinas de Función Pública, el comité volvió a convocar ayer a los trabajadores a las 8.30 horas frente al Principal. En torno a un centenar respondió a la llamada. La estampa fue la misma que el martes, a pesar de la intensa lluvia: los trabajadores se movilizaron ante un llamativo despliegue de la Ertzaintza -y la Policía Local- y entonaron cánticos contra el alcalde, a quien culpan de la huelga. "Queremos denunciar la actitud dictatorial de este alcalde. Le señalamos como el culpable de esta situación, aunque también ha tenido mucho que ver Joaquín Esteban (el concejal gasteiztarra de Función Pública), que ha sido el interlocutor no válido en este conflicto", apuntó la secretaria del comité, Mónica Gómez de Segura.

El encuentro entre trabajadores y policías se saldó con "un pequeño rifirrafe". El objetivo de los funcionarios era controlar, desde primera hora, que no se procedía al montaje de la obra del Principal, algo que hubieran considerado "ilegal". Ya entonces los funcionarios daban por hecha la suspensión de la obra de danza, algo que el Ayuntamiento confirmó al mediodía. A través de un escueto comunicado, dio por suspendida la función Didas y Eneas que la compañía de danza La La La Human Steps tenía previsto representar hoy. De las 925 butacas del teatro, casi 500 estaban vendidas. La devolución del importe de los tickets tendrá lugar a partir del 22 de marzo. Quienes compraron la entrada por Internet o en taquilla deberán acudir a la cabina y aquellos que realizaron la operación por Internet recibirán el ingreso en la cuenta de cargo.

Fuentes del Departamento de Cultura calcularon que, entre el caché de la compañía, el IVA, el gasto en hotel, transporte y montaje, la cancelación costará a las arcas municipales unos 26.000 euros. Así, tras las dos funciones suspendidas, el gasto habrá ascendido a 39.000 euros. La función de este sábado, adaptación de la televisiva Amar en tiempos revueltos, se mantiene en cartel.

Y la huelga, mientras, sigue adelante y afronta ya su sexta jornada. Para hoy, se repiten tanto la protesta en el Principal como una concentración en la residencia San Prudencio. Además, se ha anunciado una manifestación que, a las 19.00 horas, partirá del Principal y se dirigirá a la plaza de Correos.

En cuanto a la marcha de la huelga, el comité se mostró satisfecho con la asistencia a las movilizaciones. Incluso el Sindicato Independiente de la Policía Local de Vitoria -un cuerpo que no tiene derecho a huelga- mostró ayer su apoyo a "todas las medidas de presión" que adopte el comité. Y la entidad insistió en poner la pelota en el tejado del gabinete: "En sus manos está desconvocar esta huelga. Lo hemos dicho desde el primer minuto. La solución la tiene el alcalde". Desde el ejecutivo, que en todo momento ha defendido la necesidad y la forma de aplicar las medidas contra el déficit, no quisieron hacer valoraciones. Y, una vez superado el ecuador de la huelga de nueve días, las protestas continúan. Al parecer, sin remedio.